El pasado 9 de abril se celebró otra Junta Vecinal que se convirtió en la despedida de la actual.
El día 26 de marzo IU presentó tres preguntas por escrito para que el presidente de la Junta Vecinal pudiera preparar la respuesta:
1º Sobre en qué estado se encuentra el expediente de sanción a la empresa Samar Buil por el servicio de transporte público tan deficiente que prestó durante los años 2013 y 2014 y qué valoración hace la Junta Vecinal.
2º Sobre la situación del transporte escolar en infantil, primaria y secundaria para el curso 2015-2016, si existirá y en qué condiciones se proporcionará.
3º Sobre la situación en la que se encuentra la reparación del parque de La Jota, tras la denuncia de IU. ¿Quién se encarga de la limpieza actual de excrementos caninos?
Pues no obtuvimos más respuesta que la ofrecida por los medios de comunicación con el añadido de la defensa, por parte del presidente, de la empresa Samar Buil y su complacencia con que no haya sido sancionada, la promesa de la Directora Provincial Monserrat Martínez de transporte escolar de modo extraordinario (pero alegal y ya veremos si se cumple pues ya no estará en el cargo en septiembre) y que ya se limpia el parque (han hecho falta 6 meses de quejas y una denuncia de IU).
Después vinieron las despedidas y es cuando un vocal del PP acusó al representante de IU de «ser político» (sic) y que se habían sentido acosados por el tema del transporte escolar, pero ni una palabra de su apoyo al cambio normativo que eliminó el derecho de los alumnos a transporte escolar y comedor y su negativa de apoyo ante la solicitud del AMPA del Colegio.
Pero lo más triste de la jornada estaba por llegar. Al levantarse la sesión, otro de los vocales de PP espetó: «¡ojalá volviera Franco, con 20 años, ya verías cuantos se iban corriendo de España!» Ninguno de sus compañeros de partido hizo mención de afearle la conducta. Nuestro compañero de IU, entre amenazado y perplejo, le pidió que recapacitara en varias ocasiones, obteniendo la misma respuesta: «si, si, ya verías cuantos salian corriendo de España».
Más allá de las desafortunadas palabras, entendemos que un representante institucional de un partido que se define democrático, no puede mantener en el cargo a personas que no creen en los valores democráticos y añoran el regreso de una dictadura franquista. Es verdad que quedan pocas semanas de mandato pero, por higiene democrática, pensamos que no puede seguir en el cargo y pedimos su dimisión o cese.