Las carreteras españolas están en muy mal estado y nadie pone solución. Así lo asegura un estudio realizado por la Asociación Española de la Carretera (AEC), que explica que las vías de circulación de vehículos de nuestro país tienen un grado de deterioro «sin precedentes». Las que peor estado presentan son las de La Rioja y Aragón.
Los recortes sin control ni fundamento acaban pagándose tarde o temprano, de un modo o de otro. Y en el caso de Aragón, mucho tiene que explicar el Gobierno Rudi del PP-PAR.