Tarazona, 20 de octubre de 2023.- Tarazona Plural – IU presentará en el próximo pleno municipal una moción para que el Ayuntamiento establezca las posibles responsabilidades derivadas del brote de gastroenteritis provocadas por la presencia de ooquistes del protozoo Crystosporidium en las aguas del río Queiles. Esta iniciativa llega después de que, por un lado, la Junta de Castilla y León y, por otro, el Gobierno de Aragón nieguen que el brote se haya originado en sus respectivas Comunidad Autónomas.

Antonio Lorente, concejal y portavoz de TP – IU, se hace eco de la inquietud de la ciudadanía y pide “seriedad y transparencia a las administraciones ante un problema sanitario que afecta a un servicio público como es el abastecimiento de agua y que estamos sufriendo desde hace casi un mes”. 

Según las fuentes de la investigación y los responsables del Ayuntamiento de Tarazona y del Gobierno de Aragón, el citado protozoo no se encuentra presente en el nacedero del río, sino debajo de la piscifactoría que desarrolla su actividad y vierte sus aguas residuales al río Queiles, justo encima del núcleo urbano de Vozmediano. Esto, sin embargo, se contradice con las declaraciones del consejero de Medioambiente de Castilla León, Carlos Suárez-Quiñones, que niega que se haya encontrado evidencia alguna que demuestre que procede de su Comunidad Autónoma.

Denuncias por contaminación

“Las distintas administraciones y, sobre todo, la vecinas y vecinos de los distintos municipios de la ribera del río Queiles, desde Vozmediano a Tudela, pero en este caso sobre todo Tarazona, deberían comprender en su justa medida los distintos riesgos a los que estamos expuestos desde hace ya bastantes años que no solo traen consecuencias medioambientales, también afectan a la salud de sus ciudadanos”, denuncia Lorente.

A principios del año 2022, el Ayuntamiento de Tarazona decidió sumarse a las denuncias de asociaciones ecologistas por vertidos industriales y afecciones en la cuenca del Moncayo, llegando a acuerdos entre los grupos políticos en este sentido.

“El agua no es un bien comercial como los demás, sino un patrimonio que hay que proteger, defender y tratar como tal”, recuerda Lorente. “Vamos a pedir al Ayuntamiento que informe a la ciudadanía de las investigaciones llevadas a cabo con total transparencia, de las medidas a adoptar para dirimir responsabilidades y de las soluciones propuestas para resolver los problemas de calidad de las aguas del río Queiles, en un proceso abierto y participativo”, finaliza el concejal.