La portavoz de IU en el Ayuntamiento oscense, Pilar Novales, explica que “esta propuesta de resolución se basa en que la situación a nivel social no es hoy la misma que hace por ejemplo, 10 años”. A su entender, “antes de la crisis ya se apreciaba un aumento en el número de personas por debajo del umbral de pobreza, a causa de un sistema económico que cada vez genera más desigualdades”.

“Ahora, -continua Novales- con la dura situación económica y las políticas de recortes que se están sufriendo y que repercuten en mayor medida sobre las personas más débiles de la estructura económica, se suman nuevas situaciones”. En este sentido, la edil hace referencia a un informe recientemente publicado por la Red Europea Contra la Pobreza. El texto recoge que en España aumentó, entre los años 2009 y 2010, en un millón más de personas las que se sitúan en riesgo de exclusión, siendo éstas un total de 11,5 millones (un 25,5% del total de la población).

Para Novales, “esto pone de manifiesto que las políticas de ajuste y de recorte del Estado de Bienestar están destruyendo empleo y están teniendo unas consecuencias traumáticas para miles de ciudadanos”.

“Sin embargo, a esta situación no escapa esta ciudad y creemos que a nivel municipal es necesario trabajar en dos ejes principalmente: el del empleo y el de la política social”, insiste Novales, quien señala que la propuesta de resolución “pretende abordar este segundo aspecto, que nuestra política social sea efectiva y comprometida con la inclusión social y la igualdad de oportunidades, para que se pueda redefinir e innovar, para que de verdad atienda a la realidad social actual.”

Izquierda Unida considera imprescindible para ponerlo en marcha que se analicen las políticas sociales que se están desarrollando, en cuanto al alcance, la población no atendida y el cumplimiento de los objetivos fijados. A su juicio, “el documento que recoja ese análisis es el primer paso para poder impulsar la política social que necesitamos en esta ciudad”.

Para Novales, “los nuevos retos que plantea esta realidad y las nuevas situaciones no pueden ser resueltos únicamente derivando desde el Ayuntamiento hacia otras organizaciones la atención de las necesidades más urgentes, sino que ha de ser la propia institución la que dirija su política social con esos objetivos claros de inclusión social y que persigan la igualdad de oportunidades”.