Reclamamos un cambio en la política fiscal que sigue y propone el Gobierno de Aragón a la vista de los datos de merma en los ingresos de la Hacienda autonómica.

Los datos marcan un descenso en la recaudación que, para el portavoz en las Cortes de Aragón, Álvaro Sanz, tiene su origen en la bajada de las actividades económicas por esa paralización de la economía generalizada y por la decisión de bajar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones acordada por el PSOE y la derecha el año pasado.

Ciertamente, la reactivación de la economía y recuperar los ingresos que de ello derivan “no es competencia única” del Gobierno de Aragón, reconoce Sanz para quien la merma en ingresos “tiene que ver con políticas activas de empleo que hacen imposible las reformas laborales sin derogar, con cambio de modelo productivo y con políticas que potencien sectores económicos con más valor añadido que los impulsados por el Gobierno de Aragón”.

“Pero donde si es posible actuar, -reclama el diputado-, es en la capacidad que tiene el Ejecutivo autonómico para desarrollar una política fiscal que cumpla los preceptos constitucionales y democráticos, que sea justa y redistributiva y que aplique el principio básico de que quien más tiene más paga”.

“No es eso lo ocurrido con la rebaja del Impuesto de Sucesiones y Donaciones”, apunta Sanz. Ese impuesto, hasta el año pasado, solo afectaba al 10% de quienes debían pagarlo porque los primeros 150.000 €, heredados o donados, estaban exentos. Ahora, tras el acuerdo del PSOE con la derecha, están exentos los primeros 500.000 €, lo que ha supuesto una merma de ingresos de 28,78 millones de euros “que se han quedado en los bolsillos de quienes cuentan con más patrimonio”, lamenta.

“Lo cierto es que la ciudadanía aragonesa –continúa- tiene menos dinero para educación, para sanidad, para carreteras, para luchar contra la pobreza y es profundamente injusto que hayan ido a las cuentas corrientes de quienes más capacidad económica tienen”.

Con esos 28,78 millones se pueden ampliar las becas, por ejemplo, o se pueden aportar recursos para combatir las listas de espera, o se pueden construir equipamientos escolares, porque un colegio completo de una vía, incluida la educación infantil, cuesta 4,5 millones de euros su construcción.

Cambio rotundo en fiscalidad

Exigimos un cambio rotundo en la política fiscal del Gobierno de Aragón. Nos preocupa mucho la apuesta que hace el Gobierno PSOE-PODEMOS-CHA-PAR por mantener la presión fiscal en Aragón por debajo de la media española y el estudio de la eliminación del impuesto de Sucesiones y Donaciones compensando con otras fórmulas la consiguiente disminución de ingresos.

“La propuesta, incluida en el acuerdo de Gobierno cuadripartito, deja claro que bajar, o quitar, el impuesto de Sucesiones y Donaciones necesita otras fórmulas de recuperación de ingresos pero sin tener esas fórmulas alternativas que vemos”, concluye Sanz para recordar que IU continuará reclamando una fiscalidad progresiva y justa, tal como lo hemos hecho en reiteradas iniciativas parlamentarias y tal y como lo defendemos en nuestro programa electoral.