Reiteramos nuestro rechazo a la unión de estaciones de esquí de Astún y Candanchú mediante una telecabina y cuestionamos el desfase presupuestario del proyecto presentado ayer en Huesca.

El coste de esta infraestructura de transporte por cable será mayor de lo inicialmente previsto para el Gobierno de Aragón, que tendrá que asumir con fondos propios 22 millones de euros para esta infraestructura que tendrá un coste final de 35 millones de euros, de estos, 10 provendrán de fondos de la Unión Europea y 3 millones de la Diputación Provincial de Huesca.

En cuanto al coste del proyecto, nuestro Coordinador general y portavoz en las Cortes, Álvaro Sanz, formuló una pregunta parlamentaria al Ejecutivo relativa al  importe del mismo y éste le contestó que asumiría con fondos propios una cuantía de 10 millones.

“No sabemos el motivo de este desfase presupuestario y creemos que el Gobierno de Aragón debe explicar de dónde piensa sacar esos 12 millones de euros y cómo va a afectar a las arcas públicas”, subraya Álvaro Sanz para lamentar que el Gobierno del PP, como también lo hizo el socialista, “ponga todos los huevos en la cesta de la nieve con un proyecto de nula rentabilidad social y ambiental, contestado socialmente y criticado por expertos ambientalistas”.

Por otra parte, no creemos que el objetivo final de esta infraestructura sea, tal y como dijeron ayer las autoridades en su presentación, “desestacionalizar” el turismo en el Valle del Aragón, diversificar las actividades turísticas más allá del invierno y reactivar la economía local.

“La telecabina que unirá Astún y Candanchú no es una infraestructura aislada, es la ejecución de una aberración ambientalmente insostenible, innecesaria y no apoyada por toda la gente que vive en esa parte del Pirineo, como nos quieren hacer creer”, concluye Sanz quien defiende inversiones en el territorio pero que éstas “no dependan monocultivo de la nieve ligado, como vemos, a la especulación urbanística con miles de apartamentos proyectados en Astún y en Jaca”.