Los Presupuestos de Rajoy son una nueva provocación social. No son los que ha reclamado la ciudadanía el día 29 de Marzo, ni son los que necesitamos para una salida de la crisis más justa y democrática. Están hechos para cumplir los objetivos acordados en la UE para el 2012.
Vienen acompañados de una amnistía fiscal para los defraudadores lo que es una discriminación flagrante para quienes hemos cumplido nuestras obligaciones fiscales. Es insultante que lo hagan justamente cuando empieza la campaña para que los trabajadores y trabajadoras declaremos nuestro IRPF.
Ha sido provocadora la defensa de estos presupuestos que ha hecho el PP en el Congreso. Han venido a decir que hay que alegrarse, que podía haber sido peor, ya que, podían haber rebajado las pensiones, bajar el desempleo, subir el IVA, bajar salarios a los empleados públicos y, han llegado a decir, que podían haber subido la luz un 40 % en vez del 7 %. ¡¡Que bueno es el PP¡¡
Sus presupuestos son, lo dicen así, sin ruborizarse, austeros y equilibrados pero equitativos. Ya han puesto en marcha el aparato mediático para convencernos de que no se puede hacer otra cosa. Pero SI se puede. Tenemos que darlos a conocer a la ciudadanía y, como con la Reforma Laboral, explicarlos para que la gente entienda que contener el déficit público, por mucho que lo exija Europa, no puede estar por encima de las políticas sociales. No hay nada que justifique, salvo la obsesión tecnocrática de Merkel y los suyos, que ese ajuste del déficit del 8,3% al 3,5% deba hacerse en dos años.
Estudiados los Presupuestos vemos que son antisociales, tutelados por Europa y Alemania, inmorales y absolutamente ineficaces.
Son mentirosos. Mienten en lo referente a ingresos y gastos y tampoco sirven para alcanzar el objetivo propuesto de dejar el déficit en el 5,3 del PIB. No puede creerse que el ingreso por IRPF vaya a aumentar porque no se va a crear empleo y la base tributaria va a caer como consecuencia del desempleo y de la reducción de salarios que marca la nueva Reforma laboral.
Engañan al afirmar que no podemos gastar más de lo que ingresamos. Es el engaño que más repiten Rajoy, Rudi y todos los demás. Quieren hacernos creer que la crisis se debe a un incremento descontrolado de los gastos, cuando 2/3 del déficit se debe a las rebajas fiscales que han hecho por igual el PSOE y el PP y a la caída de los ingresos por las medidas de ajuste y recesión económica que están adoptando.
Una de las “trampas” más escandalosas es la que utilizan para justificar la reducción de las partidas de políticas activas de empleo. Dicen que “son programas ineficientes” y que lo harán mejor las ETTs. Creo que lo necesario son políticas públicas de incentivar la creación de empleo y no reducir en 1.500 millones de € estos programas.
Estos PGE son ineficientes, en términos económicos, y absolutamente inútiles para el objetivo de salida de la crisis. No solo porque impiden inversión y reducen las partidas para políticas de empleo, sino porque uno de los Departamentos más afectados por el ajuste es el de Educación. Mucho hablar de Europa pero no tienen en cuenta la Declaración del último Consejo Europeo que pedía a los gobiernos europeos salvar del ajuste duro los gastos en Educación, Investigación y Desarrollo. Rajoy utiliza la coartada de la UE para lo que le interesa y obvia todo lo que no coincide con su política.
Tendremos oportunidad de profundizar en el análisis en detalle de los PGE 2012 en función del debate que habrá en el Congreso. Pero, de esta primera lectura de los datos presentados por el Gobierno, saco la conclusión de que son toda una provocación social. Una provocación que, no por anunciada, es menos grave, que da la razón a quienes hicimos la huelga general del 29 de marzo y que obligan a la continuidad de las movilizaciones.
Seguiremos y ganaremos la batalla de la desinformación, venceremos la resignación impuesta, demostraremos que hay otra alternativa por mucho que nos digan que, con la crisis, sólo se puede recortar más y más el gasto público mientras se “salva” a la banca.
¡¡ Nos vemos en las calles ¡¡