Instamos al Gobierno de Aragón a redactar, aprobar y publicar en el plazo de tres meses las instrucciones y directrices claras de flexibilidad en la elaboración, transformación y venta local de cada uno de los productos autorizados para su venta directa de acuerdo con la ley 7/2017, de 28 de junio, de Venta Local de Productos Agroalimentarios en Aragón y posteriormente las comuniquen a los productores e inspectores veterinarios para su aplicación práctica.

Una reivindicación que se debatirá y votará mañana en la Comisión de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente de las Cortes por iniciativa de la ciudadanía, ya que se trata de una proposición no de ley propuesta por la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ) y asumida por nuestro grupo parlamentario.

La conocida como ley de venta local se aprobó en Aragón en el año 2017 y en su artículo 8 se expone la adaptación de los requisitos de higiene de los productos agroalimentarios. Fue dos años después, en 2019, cuando el Gobierno de Aragón aprobó la Orden que se establecía las cantidades máximas de los productos agroalimentarios que puedan ser objeto de la citada ley y, en 2020, se publica la Guía de buenas prácticas higiénico-sanitarias para la venta local.

La guía es una herramienta para ayudar al productor agroalimentario a cumplir los requisitos generales de la norma mediante la orientación para la aplicación de los requisitos higiénico-sanitarios en función de las distintas modalidades de venta local, así como para la manipulación y elaboración en su caso de los productos alimenticios recogidos en la venta local. La ley dice que se deberá disponer de las necesarias condiciones de equipamiento, higiene y funcionamiento con flexibilidad en un Plan de Autocontrol de seguridad alimentaria (con Análisis de Peligros y Puntos de Control Críticos -APPCC- e integrado los prerrequsitos necesarios) vinculado al tamaño del establecimiento y, además, recomienda realizar buenas prácticas de higiene y elaboración en los locales y equipos para la elaboración, transformación, almacenamiento, venta, transporte de los productos.

Han pasado cuatro años y medio de la aprobación de esta “importante” ley y, sin embargo, queda aún pendiente la elaboración y publicación un documento que aporte una idea “clara” sobre cómo llevar a cabo correctamente la venta local, para que los productores aragoneses puedan aprovechar plenamente esta oportunidad y complementar y mejorar su renta de explotación, tal y como han realizado otras Comunidades Autónomas, como la guía para la venta de proximidad de los productos agrarios catalanes.

Nuestro portavoz y Coordinador general, Álvaro Sanz, espera que los grupos parlamentarios apoyen esta iniciativa ciudadana en relación a una ley “muy importante para fijar población en el medio rural, para vertebrar el territorio y para avanzar hacia un modelo productivo más social y más sostenible”.

Además, Sanz ha registrado una pregunta parlamentaria dirigida al consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Joaquín Olona, para conocer cuántas explotaciones agrarias se han inscrito en la ley, qué presupuesto se ha dedicado cada anualidad a su cumplimiento y en qué estado se encuentra el desarrollo de los reglamentos por cada producto. Cuestiones que para el diputado son fundamentales conocer para analizar el impulso que debe darse al modelo familiar, social y sostenible, ya que vemos con “mucha preocupación” que, desde el Gobierno aragonés, solo se está favoreciendo la “gran promoción” agroalimentaria.