IU señala que la última planificación seria del ejecutivo aragonés sobre las avenidas del Ebro es el Plan Medioambiental del río Ebro y tramo bajo del Cinca, que data de 2005, y desde su elaboración, ni los diferentes gobiernos de Aragón ni del Estado, han avanzado en la ejecución de lo ahí diseñado

Zaragoza, 28 de febrero de 2015.- Izquierda Unida de Aragón expresa su solidaridad con los afectados de la avenida extraordinaria del río Ebro. Tanto el diputado de IU por el Alto Aragón y portavoz en la Comisión de Obras Públicas, Miguel Aso, como el diputado provincial de IU en la DPZ, José Ángel Miramón, expresan su alarma tras conocer la información transmitida por diferentes medios de comunicación, de que la riada estaría provocando a estas horas, además de importantes daños materiales, el desalojo de unas 1.600 personas de las localidades de Boquiñeni y Pradilla. Igualmente, los diputados provincial y autonómico de IU han mostrado su agradecimiento a “todo el personal desplegado, tanto voluntario como profesional de las diferentes administraciones públicas, que están intentando paliar los daños humanos y materiales que está provocando esta crecida”.
Miguel Aso ha señalado que “vamos a estar muy pendientes, tanto desde las Cortes, como desde nuestro grupo parlamentario en el Congreso de los Diputados, para que los daños ocasionados por esta avenida extraordinaria sean compensados justamente y a la mayor brevedad posible, porque tras varias avenidas que eran calificadas como ordinarias, pero que estaban produciendo importantes daños, especialmente al sector agrario, lo ocurrido en el día de hoy obliga a que las administraciones sean rápidas y justas en el pago de las indemnizaciones”.
Para finalizar, el diputado autonómico de IU ha lamentado que “el Gobierno de Aragón hubiera realizado una planificación como el Plan Medioambiental del Ebro y tramo bajo del Cinca, que data del año 2005, pero que pasado todo ese tiempo, los sucesivos gobiernos de Aragón no hayan sido capaces ni de ejecutar las medidas de su competencia, ni de convencer a Confederación para realizar las que eran de su competencia.” Aso ha querido recordar que “este plan, que fue muy participado y consensuado, contaba con 87 medidas concretas que debían ser realizadas antes del año 2020 y que pasaban por la limpieza del río, los sotos y la retirada de parte de la vegetación, así como la naturalización de choperas, la restauración de riberas o la demolición, retranqueo y construcción de nuevas motas en base a la realidad y necesidades actuales del río pasando”.
Miguel Aso Solans
Por su parte, José Ángel Miramón, que conoce de cerca los problemas que viven los pueblos de la Ribera puesto que también es concejal en Torres de Berrellén, ha finalizado insistiendo en que “lo queramos o no, el río Ebro va a seguir teniendo crecidas ordinarias y extraordinarias muy difíciles o imposibles de controlar, pero es muy lamentable que la CHE y los diferentes gobiernos de Aragón, no hayan planificado y ejecutado medidas concretas para minimizar el impacto de las avenidas. Sólo se acuerdan del Ebro y su capacidad hidrológica cuando pasan cosas como las que estamos padeciendo estos días, de hecho, en la última visita de la ministra de Medio Ambiente a las Cortes de Aragón, para la celebración de la Mesa de Seguimiento del Pacto del Agua, realizada en el mes de noviembre, le pregunté si tenía pensado impulsar el Plan Medioambiental del Ebro, un documento que reconoció no conocer porque nadie le había explicado la necesidad de impulsarlo”.
Por último, Miramón recuerda que el Consejo Político de IU Zaragoza Comarcas aprobó a principios de mes una resolución en la que se insistía en que “lo más importante es la salvaguarda de los cascos urbanos, un plan integral que solucione los problemas del tramo medio del Ebro. Un plan que solvente problemas en vez de trasladarlos aguas abajo y un inmediato sistema indemnizatorio para quienes sufran los daños, para la creación o por el mantenimiento de zonas de inundación que minoren los daños de las avenidas”.