Zaragoza, 2 de febrero de 2022.- Los datos publicados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social apuntan al incremento del desempleo en Aragón de un 0,47% con respecto al mes de diciembre. El número total de personas paradas en Aragón es de 61.349, la mayoría, 42.287, pertenecen al sector servicios, el único que ha registrado un aumento de desempleo coincidiendo con el final de las contrataciones temporales de la campaña de Navidad.

Álvaro Sanz, nuestro Coordinador General de IU Aragón, destaca que la tasa de desempleo es 27% menor que hace un año lo que confirma “el buen resultado de las medidas impulsadas por el Gobierno de coalición, especialmente por el Ministerio de trabajo y el de Derechos Sociales”. Sin embargo, advierte que las cifras “vuelven a señalar los problemas endémicos de nuestro modelo productivo y de relaciones laborales, una economía basada en sectores de poco valor añadido y marcada por la parcialidad y la temporalidad”.

En IU Aragón apostamos por avanzar hacia otro modelo, con nuevas fórmulas en las relaciones laborales “basadas en la estabilidad, la mejora del salario y la formación”. En este sentido, Sanz critica que mientras se están dando pasos para dejar atrás las reformas del PP “que desguazaban y precarizaban el empleo”, el Gobierno de Aragón aún no haya incorporado “los aprendizajes que nos deja la pandemia”.

“Debemos encaminarnos hacia un cambio de paradigma productivo más sostenible.- Apunta Sanz.- Hay que poner en el centro sectores de alto valor añadido y enfocarlos a las satisfacciones de necesidades básicas de las personas”.

Sanz alude a la falta de planificación del Ejecutivo aragonés con el despliegue de las energías renovables o la apuesta por unos Juegos Olímpicos de Invierno “sin tener en cuenta la emergencia climática”. Insiste en la necesidad de un modelo con el sector público como “tractor y garante de derechos básicos, como los cuidados o el techo” y con la economía social de PYMES y autónomos como “actores fundamentales”.

“Aragón puede y debe avanzar hacia ese cambio de modelo con industria en sus cabeceras comarcales, con un modelo agroalimentario que blinde al modelo agrario social y familiar, que desarrolle un turismo sostenible y desestacionalizado; un modelo en el que el sector de las renovables sea una solución y no un problema”, añade.