Este 20-N llega de nuevo cargado de manifestaciones fascistas donde solo se apela a la violencia contra “los otros” y que sirve como plataforma para atacar los valores democráticos, la diversidad y la justicia social. Este año, la Coordinadora Antifascista subraya como lema: “Frente al egoísmo capitalista, solidaridad antifascista”.

Zaragoza, 19 de noviembre de 2020.- Izquierda Unida Aragón, como parte de la Coordinadora Antifascista de Aragón, nos unimos a las movilizaciones antifascistas este 20-N bajo el lema “Frente al egoísmo capitalista, solidaridad antifascista” e invitamos a todo el mundo a participar. Recordamos también que se deberán respetar todas las medidas sociosanitarias establecidas.

Las organizaciones fascistas usan el 20-N como trampolín para afianzarse de los medios de comunicación con sus imágenes y gritos que vitorean una época donde no existía la libertad ni los derechos civiles. Este año, además, la fecha marca cuarenta y cinco años de la muerte del dictador Francisco Franco.

Todos los colectivos y todas las personas que luchamos contra la ideología fascista, hemos visto cómo estos tiempos convulsos de pandemia de COVID-19 han servido a fascistas para sembrar más odio. También ha servido para evidenciar cómo el sistema capitalista no es compatible con la justicia social y la protección de la ciudadanía que ha sido expuesta a un virus letal para no frenar la maquinaria del capitalismo.

«La pandemia nos está poniendo a prueba como sociedad. Ahora, valores como solidaridad, justicia e igualdad están puestos en tela de juicio como fundamento de nuestra comunidad política. El papel catalizador y reactivo de las derechas y ultraderechas en este proceso de deterioro encuentra, además, un peligroso aliado en el miedo a la pérdida de los frágiles y deteriorados derechos de amplias capas sociales, desbocando los discursos egoístas e insolidarios que son pasto de crecimiento del fascismo”, afirma Álvaro Sanz, nuestro coordinador general de IU Aragón.

El franquismo fue aliado de Hitler y su ideología nazi está sancionada en Europa. Como democracia, y estando adherido a los instrumentos internacionales, el gobierno de España debe prohibir toda forma de expresión fascista. Una democracia debe ser antifascista o no será.

“Es imprescindible la memoria democrática y la formación como el mejor antídoto a estas posiciones que acaban por consolidar sociedades basadas en la superstición, la mano dura, la violencia contra el diferente, el patriarcado o el sálvese quien pueda”, recuerda Sanz.

Cuarenta y cinco años después de la muerte del dictador Franco celebramos la aprobación de una Ley de Memoria Democrática que tendrá en la Educación su mejor garante. Un pueblo que no conoce el pasado está más cerca de repetir sus flagelos y las manifestaciones fascistas son el caldo de cultivo para que esto suceda. No hay que temer los gritos fascistas, al contrario, hay que luchar para erradicarlos. Los gritos fascistas son la última señal antes de su desaparición. Este 20-N será un 20-N antifascista.