En Izquierda Unida Aragón nos unimos a las reivindicaciones que continúan movilizando a la ciudadanía aragonesa para exigir la mejora del ferrocarril en el territorio aragonés y contra las medidas que ponen en peligro el tren como eje vertebrador. Este sábado, 15 de mayo, tendrá lugar una concentración en la estación Goya de Zaragoza.

Zaragoza, 14 de mayo de 2021.- El transporte público es el principal articulador de un territorio, especialmente el transporte ferroviario. Sin embargo, este ha visto cómo la pandemia ha reducido las frecuencias y los servicios que previamente existían. A la resistencia de Renfe por restablecer las paradas perdidas y las líneas de trenes, se une la desidia del Gobierno de Aragón que ha renunciado a hacerse cargo de los costes de algunos trenes regionales.

Todo esto está poniendo en peligro los puestos de trabajo, la conciliación familiar y la seguridad de las personas usuarias de un medio de transporte ecológico y vertebrador del territorio. Esos servicios y esas líneas aseguraban su permanencia en el medio rural, cerca de su gente, en el entorno que habían elegido para asentar sus hogares. En peligro está también el derecho a la movilidad de todas las personas que opten por la sostenibilidad en el transporte, por un desplazamiento rápido y al mismo tiempo seguro y cómodo.

En IU Aragón vemos indispensable que la movilización ciudadanía continúe para exigir lo que es su derecho y lo que protege el futuro del medio ambiente. Por ello, animamos a participar en la concentración que tendrá lugar el sábado, 15 de mayo, en la estación Goya de Zaragoza a las 13:30H.

Nuestro coordinador general de IU Aragón, Álvaro Sanz, apunta hacia las alternativas que podrían solventar algunas de las problemáticas que sufre el territorio. Sanz lamenta que no se haya aprovechado el diseño del mapa concesional del transporte para fortalecer el ferrocarril y dotarle así del protagonismo en aquellos ejes en los que opera.

“Hay líneas ferroviarias, más allá de las propias del entorno metropolitano de Zaragoza, que podían haberse convertido en líneas troncales del sistema si se hubiese apostado decididamente por la intermodalidad. Eso implicaba ser ambiciosos, negociar también con Renfe para mejorar líneas, horarios y servicios, pero se ha preferido diseñar el mapa de transporte público dándole en cierto modo la espalda al tren”, afirma Sanz.

La recién aprobada Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica, que planea la descarbonización de la economía antes del año 2050, supone para IU una oportunidad para enfocar las inversiones y las estrategias de transporte y movilidad hacia el desarrollo del ferrocarril. Un ferrocarril público que responda a las necesidades reales de la sociedad aragonesa, que se dirija hacia un horizonte verde y que saque a Aragón de la España vaciada.