No compartimos las medidas adoptadas por el Departamento de Sanidad para hacer frente a la séptima ola de la Covid-19 porque considera que las lógicas bajo las que se sustentan deberían ser “desterradas” porque la salud debería seguir siendo el primero de los derechos a preservar.

Ante el colapso de la Atención Primaria, nuestro Coordinador y portavoz parlamentario, Álvaro Sanz, ha advertido que con el cambio de protocolo propuesto por Sanidad por el que solo se hará investigación a los contactos de positivos de Covid a las personas que sean convivientes, mayores de 65 años, personas vulnerables (embarazadas y crónicos), que vivan en residencias y trabajadores sanitarios y sociosanitarios “se está renunciando a la prevención” y cree que no servirá para vencer a la pandemia, ni para descongestionar la Atención Primaria.

Sanz ha recordado que su formación política siempre ha rechazado las medidas que han primado proteger la economía por encima de la salud y fue muy crítica cuando, hace unos meses, se empezó a despedir a ese personal de refuerzo sanitario y cuyas consecuencias estamos viendo, como son el colapso y la sensación de abandono por parte de la ciudadanía por la Atención Primaria que es la puerta de entrada a la sanidad.

Para el diputado, la medida que dice que si alguien que es contacto de un positivo puede ir a trabajar si está vacunado y no se le confina genera “mucha incertidumbre”, es “incomprensible” y no es “coherente”.

Ante el aumento de contagios diarios y el colapso de la Atención Primaria, instamos a actuar de manera urgente con medidas. Algunas de éstas tienen que desarrollarse desde el Estado y, en ese sentido, las estamos planteando a través del grupo confederal Unidas Podemos.

En cuanto a los centros de trabajo, reclamamos desburocratizar los procesos de baja laboral, desmarcándola de la Atención Primaria y facilitando que ésta se produzca de forma telemática durante toda la nueva ola. “Intentar frenar la transmisión comunitaria requiere incidir en los espacios de socialización más habituales que son los centros de trabajo”, ha apuntado Sanz, que aboga por mantener el teletrabajo siempre que sea posible, ya que esta medida ha tenido una importante relevancia en las anteriores olas.

También ha incidido en el establecimiento de protocolos de ventilación cruzada en todos los establecimientos abiertos al público y centros de trabajo, una medida en la que las administraciones locales pueden jugar un papel importante adaptando esto a las necesidades de cada municipio, al igual que la ventilación en los medios colectivos de transporte y un mayor uso de mascarillas FPP2.

Rastreadores y plantilla estable

En el caso de la sanidad pública aragonesa, Sanz ha exigido liberar a la Atención Primaria de las labores de rastreo aumentando la contratación de rastreadores y epidemiólogos de campo que la lleven a cabo y, respecto a los test de antígenos, apuesta porque sea un recurso realizado por personal adecuado para garantizar una correcta técnica y una notificación temprana de la sospecha. Además, esto favorecería una redistribución efectiva de las adquisiciones para que no se den acaparamientos ni especulación como la que estamos padeciendo.

Sanz ha demandado mantener una plantilla estable durante todo el periodo pandémico y los años posteriores que posibiliten la respuesta asistencial, así como la redistribución de personal y de recursos, a pesar de que estamos lejos de que Atención Primaria suponga el 25% de los recursos presupuestarios. Además, insta al Ejecutivo a propiciar medidas que descongestionen Atención Primaria sin eliminar su capacidad asistencial, como por ejemplo, sacando las vacunaciones de los centros de salud, habilitando otros lugares adecuados en los barrios y espacios públicos.

Por otro lado, apostamos por potenciar la prespecialidad asistencial en Atención Primaria, porque cree que permite una detección precoz de las complicaciones del virus de la Covid  lo que posibilita tratar antes, evitar ingresos hospitalarios y reducir la estancia media, reclama fomentar las urgencias ambulatorias para patologías menores y para sintomáticos leves. “Las urgencias ambulatorias descargan la demanda de la urgencia hospitalaria, facilitando así la atención, disminuyendo costes y mejorando la asistencia, así como garantizar la atención a toda la patología no Covid, que sigue existiendo y no se puede desatender”, ha señalado Sanz para exigir que se revierta la reformulación de las urgencias de Primaria en Zaragoza que redujeron su capacidad para poder atender la presión asistencial actual.

En cuanto a las residencias, foco de atención durante la pandemia, Sanz ha destacado que “se han quedado fuera” del bloque de medidas planteado por la consejera ayer. En su opinión, “se debe equilibrar la salud con la garantía de derechos de los residentes y la ausencia de modificación del decreto de ratios mínimas que hubiera garantizado mejor capacidad de atención al aumentar su dotación, es un debe que no pueden pagar otra vez los residentes”.

Por último, Sanz ha instado al cuatripartito a garantizar una adecuada información pública a la población para limitar los efectos que produce la información no veraz, como es el “caos” y la “incertidumbre” actual. “Es fundamental que la ciudadanía disponga de información clara, fiable, accesible, objetiva y seria sobre los cambios en los protocolos y, para ello, se deben poner todos los medios disponibles como puede ser aumentar la capacidad de las líneas telefónicas habilitadas”, ha concluido.