Zaragoza, 13 de septiembre de 2022.- Desde Izquierda Unida Aragón manifestamos nuestra preocupación con el ataque que tuvo lugar este fin de semana a una mujer en Escatrón a manos de su exmarido y que la ha dejado en estado grave. 

La Fiscalía ha solicitado prisión provisional sin fianza por un delito de tentativa de homicidio y otro por quebrantar la orden de alejamiento que le impedía acercase a su exmujer a menos de 500 metros. La investigación continúa su curso, pero algunos medios ya han informado de que la primera acusación de tentativa de homicidio dependerá del estado de la mujer, algo que a IU Aragón preocupa.

“Cuando alguien invade tu casa a las 4 de la mañana y te agrede en la cama, parece que la intención de asesinar es clara y no depende de si la mujer sobrevive o de la gravedad de sus lesiones”, asegura Marga Deyá, nuestra responsable del Área de Mujer de IU Aragón.

Este terrible ataque machista refleja la necesidad de que las órdenes de alejamiento se sustenten en el control de los agresores y no esperar a que la ley actúe cuando se saltan dichas órdenes y ya es demasiado tarde. Por ello, pensamos que hay que revisar los protocolos de protección ante agresiones machistas que se centren en el control del agresor y consideramos que la vía punitiva no está evitando las agresiones, por lo que debemos acentuar la vía preventiva. Debe ser una prevención sobre quién lo causa, es decir, sobre los agresores.

“Ya que parece que las consecuencias de sus actos y la intensificación de las penas no están evitando las agresiones, necesitamos actuaciones que prevengan y eviten que se produzcan dichas agresiones y en este sentido el foco son ellos, los agresores”, apunta Deyá. “Es necesario revisar las actuaciones contra la violencia de género para evitar que el agresor concrete sus intenciones violentas y para permitir a las víctimas vivir sin miedo”, añade.

Desde IU pensamos que es indispensable atajar con la violencia machista desde la raíz, concienciando sobre el hecho de que la violencia machista es estructural, reforzando y potenciando la educación y la conciencia  sobre el patriarcado y sus consecuencias. 

“Aún queda mucho camino por andar para abolir de nuestra sociedad el patriarcado, por lo que seguiremos trabajando para denunciar sus actuaciones y plantear propuestas que corrijan y reviertan la desigualdad en la que se basa”, sentencia Deyá.