El grupo parlamentario de IU Aragón trasladará mañana a la Comisión de Sanidad de las Cortes las reivindicaciones del personal sanitario y administrativo, así como de las y los usuarios del Centro de Alta Resolución (CASAR) de Ejea, quienes muestran su malestar y preocupación por el aumento en las listas de espera, la reducción de personal y por la falta de información y por las consecuencias de su futura integración en el Servicio Aragonés de Salud.

Cabe recordar que IU siempre ha defendido la integración del CASAR Cinco Villas en el SALUD, “pero que se hiciera garantizando el mantenimiento de la cartera de servicios y la dotación de personal, manteniendo todos los puestos de trabajo”, señala la portavoz de Sanidad de IU Aragón, Patricia Luquin.

A la incertidumbre sobre esta integración, se unen las denuncias realizadas por los y las trabajadoras por la falta de información sobre el proceso, el aumento de las listas de espera, la no sustitución de ausencias por bajas laborales, permisos o las plazas que han quedado vacantes. Para la portavoz de IU Aragón, “este tipo de situaciones, que repercuten de mantera directa en la asistencia y en la calidad de la prestación y suponen un sobre esfuerzo por parte de las y los trabajadores para que el centro Cinco Villas siga funcionando con cierta normalidad, están provocadas por recortes sostenidos en el tiempo, como son los que el Partido Popular aplica en materia sanitaria”.

Izquierda Unida entiende que esta situación no puede sostenerse en el tiempo y reitera que “es responsabilidad del consejero de Sanidad cumplir con el derecho a la salud de los habitantes de esta comarca y garantizar una asistencia sanitaria de calidad”. Por ello, mañana presenta una Proposición no de Ley en la que reclama al Gobierno de Aragón a que adopte de manera urgente las medidas necesarias para que la integración del CASAR se haga garantizando el mantenimiento de la cartera de servicios sin que se produzca ningún recorte en la prestación de servicios, así como, garantizar la integración de la totalidad de la plantilla en las mismas condiciones laborales que tienen en la actualidad para así poder mantener la prestación sanitaria en las mismas condiciones que se realizaba hasta la fecha y no perjudicar a las y los usuarios de la zona en su asistencia sanitaria.