IU Aragón vuelve a mostrar su “total desacuerdo” con la implantación de los grados en Educación Infantil y en Educación Primaria en la Universidad privada San Jorge de Zaragoza.
A pesar de que las Cortes de Aragón se encuentran disueltas debido a las próximas elecciones autonómicas, el Gobierno acaba de aprobar la orden para autorizar esta puesta en marcha de las titulaciones de Magisterio en el campus privado.
Patricia Luquin, candidata de Izquierda Unida a la presidencia autonómica, califica de “sinsentido” esta aprobación y recuerda el “grave perjuicio que se causará a la universidad pública”, puesto que ambas titulaciones se imparten en los campus públicos de Huesca y Teruel.
Por su parte, Luis Ángel Romero, candidato de IU Aragón por la provincia de Teruel, se suma a este rechazo y ahonda en la necesidad de “apostar por la universidad pública, la única que garantiza el libre acceso a la educación universitaria de todos los ciudadanos y ciudadanas en igualdad de condiciones y potenciar los campus de Huesca y de Teruel para favorecer la vertebración del territorio, algo necesario en una Comunidad como la nuestra”.
En este sentido, Luquin ha vuelto a denunciar “las políticas neoliberales” de la consejera Serrat en materia educativa y su “incapacidad” para gestionar lo público en la Comunidad Autónoma. Además, la formación política y social de izquierdas reitera su apoyo en Aragón a los movimientos estudiantiles y del personal educativo en general, como ya hiciera en estos años rechazando las “nefastas” reformas del ministro Wert en materia universitaria.
Para IU, la igualdad de oportunidades en el acceso a la universidad no será posible sin cambiar las políticas de recortes que viene aplicando el bipartidismo. “La sangría que desde 2010 sufren las universidades públicas en sus presupuestos –concluye Luquin– ha hecho retroceder su nivel de gasto casi una década y la subida de las tasas aplicada por el PP o el escaso valor que otorgan a los títulos de grado universitarios, los más accesibles, condenan a los y las jóvenes a la precariedad en un mercado laboral cada vez más competitivo, por no hablar de los efectos devastadores que sus reformas y decretos están teniendo sobre el profesorado”.