“La consejera de Educación debe dimitir o el presidente de Aragón debe cesarla ante su nefasta gestión en relación con la escuela de Caneto, en Huesca”, reclama nuestro Coordinador general y portavoz parlamentario, Álvaro Sanz, tras conocer la resolución de la Sala Contencioso Administrativo de Tribunal Superior de Justicia de Aragón que resuelve que el colegio de Caneto siga prestando sus servicios en beneficio de los menores al estimar la medida cautelar solicitada por la Asociación de madres y padres de Alumnos y Alumnas ‘Aldea de Caneto’ y por catorce padres y madres más contra la decisión del Departamento de Educación del Gobierno de Aragón de cerrar las aulas.

Para Sanz, la consejera de Educación, Claudia Pérez Forniés, ha mostrado que “no tiene capacidad” para gestionar el Departamento responsable de la escuela rural, de la educación pública y lo ha hecho, además, “sin escuchar, mostrando soberbia y poca cintura”. “Educación decidió echar el cierre de una escuela rural con 21 alumnos de un día para otro y lo hizo casi echando la culpa las familias de que permitieran que sus hijas e hijos estuvieran escolarizados en un lugar, según Pérez Forniés, nada seguro”, ha aseverado Sanz quien ya denunció que la opción de llevar a los menores a Tierrantona no podía ser la opción por la peligrosidad de la carretera, más aún, en invierno, y reclamó desde el principio que la escuela no fuera cerrada.

Por su parte, el Coordinador de IU Alto Aragón, Vicente Guerrero, advierte que desde el 7 de noviembre, por decisión de la consejera, el alumnado y sus familias se han visto sin escuela y “sintiendo que era responsabilidad suya el mantenimiento de la escuela”. Nada más lejos de la realidad porque quien tiene la competencia y responsabilidad solo es el Gobierno de Aragón”. Por todo ello, pedimos al Gobierno de Azcón que no recurra la resolución del TSJA, permita que el alumnado vuelva a la escuela de Caneto y cese a la consejera en el caso de que ésta no dimita