El Consejero ha reconocido el desfase, pero para sorpresa de Izquierda Unida solo ha sido capaz de justificar 14 de los 45 millones que sabemos que cuesta la obra y que no ha negado en ningún momento. Izquierda Unida le ha preguntado por esos 31 millones de diferencia y el Consejero no ha dado ninguna explicación y no ha contestado a por qué las empresas beneficiarias no asumen ninguna responsabilidad en este sobrecoste
El diputado de Izquierda Unida Aragón, Álvaro Sanz, ha pedido que se explique por qué se entregan 45 millones de dinero público a la gestión privada del esquí que saldrán únicamente de los bolsillos de los aragoneses y estaban previstos en 37 millones de euros menos.
El proyecto contará con una aportación de 3 millones de euros de la Diputación Provincial de Huesca, 10 millones serán cubiertos con fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) del Plan Extraordinario de Sostenibilidad Turística y el resto los aportará el Gobierno de Aragón.
“Algo que iba a costar 8 millones, cuyo promotor no es el Gobierno de Aragón, y cuyo beneficio recae en dos estaciones privadas, acaba costando 45 millones y no se hacen responsables ni el promotor ni las empresas. Las excusas dadas para justificar el sobrecoste son pueriles y la factura no para de aumentar. De 8 a 45 porque no sé quién se había olvidado de añadir el IVA, los gastos generales o el beneficio industrial, que son de manual.” Ha criticado Sanz en el Pleno de las Cortes esta mañana.
En respuesta a una pregunta parlamentaria del 13 de junio sobre el Plan Pirineos, no se advirtió de ninguna modificación sobre el plan financiero. Sin embargo, el 17 de septiembre, se presentó el proyecto, que está en trámites de licitación, anunciando que estaciones de Astún y Candanchú quedarán unidas a partir de otoño de 2026 con una telecabina que costará de 35 millones de euros. Los fondos MRR se ejecutarán por la Mancomunidad del Alto Valle del Aragón (MAVA), el 50% a 31 de diciembre de 2024 y el 50% a 31 de marzo de 2026.
La conexión se realizará mediante dos instalaciones: una telecabina de 10 plazas y un telesilla de 4, que podría ser sustituido por una cinta transportadora cubierta. Unas instalaciones que en 2026 tendrán un rendimiento mínimo con un coste máximo.
“Por supuesto, todo ello dentro de la política habitual del Gobierno de Aragón que sigue engordando las arcas privadas de un sector económico minoritario y en el camino contrario a los fines para los que debería servir este dinero: para la desestacionalización del turismo en todo Aragón, para avanzar en la recuperación y resiliencia y para hacer frente a los problemas del cambio climático, ante los que el señor Azcón sigue estando de espaldas, de nuevo para llenar los bolsillos de dos empresas privadas con dinero público” ha concluido.