El Gobierno de Aragón somete a la educación pública a la lógica del libre mercado con un decreto de escolarización con el que busca fortalecer a la enseñanza concertada ante el descenso demográfico en lugar de favorecer al sistema público, el único que garantiza equidad, excelencia y valores compartidos.

Para nuestro Coordinador y portavoz parlamentario, Álvaro Sanz, hay tres cuestiones que vienen a reforzar y a reflejar las sospechas que teníamos sobre los propósitos de un Gobierno que está dejando claro que trabaja “para los suyos, para los de siempre, y que le importa muy poco cumplir con su obligación de planificación dejando todo en manos del mercado para que sea el mercado el que autorregule y al final paguen siempre los mismos”.

El diputado ha denunciado, además, la falta de debate y de consenso del Ejecutivo de Azcón que, a través de su consejera de Educación, Claudia Pérez Forniés, hoy ha anunciado el comienzo del proceso de  escolarización con una zona única en el municipio en la que primará la proximidad al domicilio y que incluye por primera vez el ciclo 0-3 años. Un tramo que viene respaldado por una red de guarderías de la DGA conformada por 11 centros en todo Aragón y que deben dar salida a las necesidades de escolarización del alumnado 0-3 años. La consejera ha anunciado que se abrirán 18 aulas más de 2 años que sumadas a las 56 actuales tendrán que dar respuesta a todas las necesidades de las familias y creemos que va a generar “inequidad” en el territorio y frustración, que espera que no sirva de ”coartada” para profundizar en las políticas de concertación en próximos años.

En segundo lugar, Sanz cree que esa zona única de escolarización que se constata en el decreto es una medida más para facilitar que los colegios concertados “repesquen” población lejos de su ámbito de escolarización.

“La oferta y la demanda no puede ser el único criterio en materia de oferta educativa y esto es lo que plantea este decreto”, ha subrayado Sanz para aseverar que la Administración debe actuar ante el descenso demográfico con el fortalecimiento de la capacidad de las aulas públicas en lugar de trabajar para que la concertada esté en la mejor de las opciones para mantenerse y crecer, que es lo que está haciendo el Gobierno de Aragón con este decreto de escolarización.

Sanz ha insistido en la necesidad de evitar la sobreoferta de plazas porque provocará el cierre de vías en los colegios públicos ya que, como vemos, “los conciertos no se tocan”. En este sentido, Sanz ha advertido del cierre de vías en la pública conlleva que los centros pierden auxiliares, especialistas y capacidad para desarrollar tareas y, por lo tanto, calidad. Circunstancia que vamos a vigilar con la exigencia de que en esos centros que se queden con una vía se garanticen los recursos necesarios y óptimos.

Además, continuaremos nuestro su trabajo de la mano de la comunidad educativa, como estamos haciendo, en defensa de la educación pública.