Un total de 773 personas dependientes están en lista de espera de un recurso residencial en la provincia de Huesca. Una cifra “muy elevada” y es un síntoma del verdadero “limbo” de la Dependencia, personas que están esperando recibir la prestación que le ha sido asignada.

En la ciudad de Huesca, únicamente hay plazas concertadas en las residencias “Los Olivos” y “Avenida Cosculluela”. En la primera, hay 5 plazas ofertadas en el Acuerdo Marco en vigor , de ellas, 4 plazas están concertadas, por lo que queda una disponible. En la segunda residencia, hay 40 plazas ofertadas y, de ellas, 16 están ocupadas, por lo que quedan 24 libres. “No sabemos por qué en la ciudad de Huesca hay 25 plazas sin ocupar cuando la lista de espera de personas dependientes crece cada día”, apunta el Coordinador y portavoz parlamentario, Álvaro Sanz.

Por otro lado, en las residencias públicas se están reduciendo plazas, aunque en la residencia Ciudad de Huesca van a volver a abrir el ala que está actualmente cerrada.

No entendemos por qué no están cubiertas esas 25 plazas concertadas en Huesca y se reducen plazas en las residencias públicas amortizando personal de servicios para contratar personal de gestión y coordinación.

Los datos sobre las plazas han sido facilitados por la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, Mª Victoria Broto, en una respuesta a una pregunta escrita de nuestro grupo sobre el número de personas dependientes en lista de espera de un recurso residencial y sobre la amortización de puestos de trabajo en residencias del IASS.

En este sentido, Sanz preguntó a Broto por la amortización plazas en las residencias del IASS en el Alto Aragón ante la preocupación de las trabajadoras del servicio de limpieza y de cocina que ven reducida su capacidad. “Un paso previo habitual de este Gobierno para forzar una externalización”, advierte el parlamentario. La consejera en su respuesta ha asegurado que “no se modifica ni se cuestiona el sistema actual de estos dos servicios”. El Gobierno justifica la amortización de plazas por el cambio de modelo en unidades de convivencia para lo que plantean que “reforzar áreas y equilibrar otras con el fin de lograr los objetivos definidos por el IASS y por las líneas generales plasmadas en los Acuerdos del Consejo Interterritorial en relación a los criterios de acreditación de centros, que garanticen ratios adecuadas y racionales de atención en todas las áreas de actividad de los centros”. Una respuesta que para Sanz es “vaga” y “no resuelve” las dudas y temores de las trabajadoras de las residencias.

La situación es “preocupante” ya que el Decreto que debe cambiar las condiciones mínimas de las residencias “sigue sin modificarse” y, por tanto, no se conocen qué ratios se plantean. Además, consideramos que las actividades de limpieza se ven influidas por el número de residentes pero también por las características de los espacios y no entendemos porqué se plantea reducir personal de limpieza ni sabemos qué criterio se está siguiendo.

“Parece que el Departamento ha olvidado las lecciones que nos dejó la pandemia donde el personal de atención directa cubrió un papel fundamental en las residencias y demostró la debilidad en materia de personal que tenían las residencias”, asevera Sanz.

Asimismo, los anuncios de amortización de plazas en residencias del IASS también llegaron a la provincia de Teruel e Izquierda Unida teme que la situación se extienda a Zaragoza, pero “no hemos recibido una respuesta con datos por provincias”, apunta Sanz para quien la idea de una “futura externalización” de servicios que presta el IASS no se ha “desvanecido” tras esta respuesta de la consejera.