Zaragoza, 25 de marzo de 2022.- El 30 de marzo se celebra el Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar con objetivo de visibilizar y concienciar sobre la dignificación del trabajo de estas mujeres que sufren precariedad y falta de derechos.

Un año más, trabajadoras, sindicatos, así como la Asociación de Trabajadoras del Hogar y Cuidados de Zaragoza, exigen que sea ratificado el Convenio n.º 189, aprobado en el 2011 por la Organización Internacional del Trabajo, que incluye derechos básicos para las trabajadoras del hogar y que a pesar de las promesas, sigue pendiente en nuestro país. Este convenio equipara dicho trabajo con cualquier otro empleo promoviendo su inclusión en el régimen general de la Seguridad Social y, por tanto, a la prestación de desempleo a la que en la actualidad no tienen acceso.

Desde el Área de Mujer de IU Aragón afirmamos que la inclusión de las mujeres en el ámbito del empleo se ha producido sin avanzar en un debate sobre el modelo de cuidados que tradicionalmente asumían las mujeres en el hogar de forma invisible y gratuita. Esta ausencia ha provocado que la asunción de ese trabajo en el hogar se haya trasladado a su cobertura por el mercado laboral en condiciones de precariedad y de explotación para facilitar su generalización.

“Las trabajadoras del hogar conforman un sector imprescindible para la sociedad y para la economía, el problema es que no es valorado como tal porque es heredero del trabajo de cuidados yse considera un trabajo de segunda, se trata de un sector muy feminizado y racializado”, asegura Marga Deyá, nuestra responsable del Área de Mujer de IU Aragón.

Deyá explica que gran parte de las mujeres que desempeñan las labores de servicio doméstico son mujeres de origen extranjero, mujeres que se dedicaban a otros sectores en su país, pero que se ven abocadas a este nicho laboral por su situación jurídico-administrativa y la actual Ley de extranjería.

“Por un lado, porque suele ser uno de los empleos de difícil cobertura para las que admiten población extranjera y, por otro lado, porque las que llegan sin la situación regularizada lo hacen como internas, donde pueden trabajar durante los tres años necesarios para conseguir el arraigo, ya que es un espacio difícilmente controlable por inspección de trabajo”, esclarece Deyá.

Desde IU denunciamos que muchas de ellas, especialmente aquellas que lo hacen como internas, trabajan en condiciones que rozan la esclavitud con la promesa por parte de sus empleadores de que estos les tramitarán la documentación y les harán un contrato. “Un contrato es imprescindible para mantenerse en España, por lo que resulta muy difícil salir de este nicho laboral para todas las mujeres que trabajan en él”, apunta Deyá.

Apostamos por una modificación de la Ley de Extranjería que corrija la ciudadanía de segunda que genera y ha apoyado desde su lanzamiento la campaña de la Iniciativa Legislativa Popular que busca recoger 500.000 firmas para la regularización extraordinaria de 500.000 personas migrantes en nuestro país.

“Las trabajadoras del hogar siguen sin tener una igualdad de derechos con el resto de trabajadores y la falta de derechos y deberes hace que estén desprotegidas ante el abuso y la explotación”, señala Deyá. “Modificar la Ley de Extranjería y una regularización extraordinaria son elementos complementarios que mejorarían la realidad de las condiciones de las empleadas de hogar”, asegura la responsable del Área de Mujer.

Este fin de semana se convoca una movilización estatal de trabajadoras del hogar y, en red con ellas, la Asociación de empleadas de hogar y cuidados de Zaragoza ha convocado una concentración el sábado 26 de marzo en el Paraninfo de Zaragoza, a las 18:00H. Desde IU Aragón hacen un llamamiento a participar en estas movilizaciones y apoyar a las trabajadoras del hogar.