La Izquierda Plural ha reivindicado, en el día que se celebra el Día de la Agricultura, la necesidad de una Europa libre de Transgénicos y la apuesta de la coalición por la soberanía alimentaria a través las pequeñas y familiares explotaciones agroganaderas. Una reivindicación que la candidatura aragonesa ha realizado acompañada de militantes de la coalición que han protagonizado una ‘performance’, frente al Mercado Central de Zaragoza, para representar su apuesta por los productos agroecológicos frente a los transgénicos.
“En estos momentos Aragón es el territorio donde más transgénicos se producen y donde existen más campos de experimentación con este tipo de cultivos”, ha destacado Iturbe para calificar a la Comunidad como “el laboratorio transgénico de Europa” ya que “somos el mayor granero de material transgénico de Europa y casi de todo el mundo”.
Frente a eso, Iturbe a defendido que Aragón “es un paraíso agroecológico”, como es la vega media del Ebro que produce productos de gran calidad y sobre la que la coalición asegura que trabajará para que siga siendo así. “Sobre qué se cultiva también se decide en Europa”, ha advertido el candidato de La Izquierda Plural para explicar de qué manera afecta a la agricultura el Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos y la UE que tiene que votar el Parlamento que se configure tras el proceso electoral del 25 de mayo. “Este tratado va a regular si se pone freno al producto transgénico y se termina de machacar al pequeño agricultor o si, por el contrario, se apoya a las explotaciones familiares y se frena los OMG”. “Queremos evitar que las multinacionales transgénicas ahoguen a quienes hacen una agricultura tradicional y de calidad”, ha aseverado.
Desde la coalición insisten en que el 25 de mayo también se decide si Aragón es un “infierno transgénico o un paraíso agroecológico”, algo por lo que apuesta sin dudar La Izquierda Plural que votará en contra del Tratado de Libre Comercio y trabajará con la finalidad de poner en marcha unas políticas agrarias que pongan freno a la mala calidad y peligrosidad del transgénico y aboguen por la alta calidad del producto agroecológico.
Los candidatos han defendido que modelo social mayoritario de Aragón, la agricultura y ganadería familiar, tenga un nivel de renta “digno”. Para ello, consideran necesario poner coto al control que sobre la cadena agroalimentaria tienen las grandes multinacionales de la alimentación. Esta es la razón fundamental por la que se opone al Tratado de Libre Comercio, “un tratado al que ni PP ni PSOE han querido someter a referéndum en España a pesar de que nuestro grupo en el Congreso, La Izquierda Plural, lo exigió a través de una iniciativa parlamentaria”, ha explicado la candidata, Beatriz Izuel.
“Lo que se va a conseguir con la firma de este tratado es que se dé más poder a las multinacionales del agronegocio frente a las pequeñas explotaciones agroganaderas y por ello, el que saldrá perdiendo será el campo aragonés, los y las consumidoras y el modelo social mayoritario de nuestra Comunidad que lo va a tener mucho más difícil todavía para sobrevivir”, ha denunciado Izuel.
En este sentido, la Izquierda Plural propone una política agraria para la UE que desarrolle mecanismos de gestión, de intervención sobre la producción y de control de los precios “para poder diseñar un modelo de soberanía alimentaria de los pueblos”, ha señalado la candidata.
Los derechos de las y los consumidores también son una preocupación que La Izquierda Plural recoge en su programa electoral. “La gente tiene derecho a saber qué es lo que consume y que lo que se consume es un producto de calidad”, ha reivindicado el candidato Alberto Cubero.
Para que esto sea posible con plena garantía, la coalición aboga por un correcto etiquetado de los productos y un apoyo real a los productos ecológicos y de proximidad. Para Cubero se debe acabar con la desigualdad existente entre las grandes distribuidoras y los pequeños productores y para lo que propone una reglamentación sobre el etiquetado y los precios y la defensa de las cooperativas de distribución, que son aquellas que tienen un contacto directo con los consumidores frente a los monopolios de las grandes distribuidoras.
En Aragón, existen iniciativas en este sentido como es el caso de algunos comedores de colegios y hospitales públicos donde se consumen productos eclógicos y de proximidad o como la del Ayuntamiento de Zaragoza con el proyecto Life de apoyo a la huerta ecológica y de proximidad.