La formación denuncia el uso del deporte como herramienta de propaganda de un estado acusado de crímenes de guerra y pide facilitar un espacio informativo durante la salida de etapa en Monzón
El Grupo Municipal Cambiar Monzón – Izquierda Unida llevará al pleno del Ayuntamiento que el municipio se adhiera a la campaña internacional “Deporte sin Genocidio” y rechace públicamente la participación del equipo ciclista Israel-Premier Tech en La Vuelta a España.
La iniciativa llega a pocos días de la salida de etapa prevista en Monzón el sábado 30 de agosto, y busca que la ciudad no se convierta en escaparate de una operación de propaganda (sportswashing) por parte del Estado de Israel, denunciado por múltiples organismos internacionales por crímenes de guerra y violaciones sistemáticas de derechos humanos contra el pueblo palestino.
“El equipo lleva el nombre oficial del Estado de Israel y está financiado por instituciones vinculadas al sionismo. Su participación en La Vuelta convierte esta competición en una herramienta de propaganda internacional para blanquear un régimen de apartheid”, ha denunciado el portavoz de Cambiar Monzón – Izquierda Unida, Vicente Guerrero.
La propuesta subraya que organizaciones como Amnistía Internacional, Human Rights Watch o B’Tselem han documentado de forma reiterada violaciones graves de derechos humanos por parte de Israel, y recuerda que plataformas como BDS, RESCOP o la propia campaña “Deporte sin Genocidio” impulsan acciones pacíficas para frenar la instrumentalización política del deporte.
Además de sumarse a esta campaña, Cambiar Monzón – Izquierda Unida propone que el Ayuntamiento remita una carta a la organización de La Vuelta solicitando la exclusión del equipo Israel-Premier Tech, y que traslade esta posición al Gobierno de Aragón y al Gobierno de España. También propone habilitar durante la jornada del 30 de agosto un espacio informativo en Monzón para que organizaciones como BDS o la plataforma “Deporte sin Genocidio” puedan informar y sensibilizar a la ciudadanía.
“Monzón no puede ser cómplice pasivo. Esta es una oportunidad para alzar la voz desde el ámbito local en defensa de los derechos humanos y contra el uso del deporte como herramienta de blanqueo político”, ha concluido Guerrero.