Ese es el precio que Ciudadanos y el PP ponen a sus votantes. Eso es lo que se deduce del acuerdo al que Rivera y Rajoy, tras los aspavientos de los últimos días, han llegado en un tiempo record.
Serviría también, para explicar el acuerdo, aquel viejo dicho del burro, el palo y la zanahoria, pero me centraré en esos euros que dice Rivera vendrán a nuestros bolsillos.
Vaya por delante que el presupuesto global es, como no podría ser de otra manera, un presupuesto neoliberal, que mantiene los recortes que impone el techo de gasto y que responde a la política económica y social que, como bien sabemos, nos hace cada vez más pobres al mismo tiempo que crecen las fortunas de otros y otras. Nada nuevo, unas medidas populistas a modo de zanahoria y el palo que significa seguir consolidando los recortes en el gasto público.
Un primer dato. Nos quieren hacer creer que la crisis ya ha pasado, que lo hemos superado y que estos presupuestos son sociales, y además justos. Es una escandalosa y burda mentira. Los presupuestos de 2010, justo al inicio de la crisis, eran de 182.439 millones de €. Los que han pacto Rivera y Rajoy, los que van a llevar al Congreso, suman 119.834 millones de €.
Ponen delante los árboles de unas pequeñísimas rebajas fiscales, nos enseñan unos euros al mes, y nos tapan la jungla de los recortes. Estos presupuestos “sociales” y justos” tienen un 34 % menos de inversión en gasto público que los de 2010.
Lo que han acordado significa subir el mínimo exento del IRPF de 12.000 a 14.000 €. Ciertamente ello, a los salarios de entre 12.000 y 14.000 € anuales les supondrá unos € mensuales, dependiendo de sus circunstancias personales (soltero/a, con hijos/as, dependiente a cargo,…) hablamos de entre 50/90 € mes.
Eso sí, seguirá el empleo basura y la precariedad laboral, y la economía sumergida y las empresas seguirán beneficiándose de las rebajas del impuesto de sociedades y de las bonificaciones de las cotizaciones sociales.
Vamos al anuncio para los/as pensionistas. Ya dijo Rajoy el otro día que subiría las pensiones mínimas así que esas, las mínimas, las que están sobre los 600 €, la zanahoria está valorada en un 2 % de subida lo que significa una subida de 12 €.
Se completa, por cierto ¿se han dado cuenta de la similitud cromática entre Ciudadanos y las zanahorias?. Bien, a lo que íbamos, se completa la oferta a pensionistas con un complemento fiscal negativo (es decir que pasado el ejercicio fiscal se les devolverá) a quienes cobren entre 600 y 1000 €, y para quienes cobren entre 1000 y 1250 € una rebaja fiscal que supondrá entre 30/60 € al mes. Estas medidas, dicen los/as “zanahorios/as”, benefician a 7,2 millones de pensionistas pero a ninguno/a se le devuelve el poder adquisitivo perdido en estos años.
Pues bien, pero seguirá habiendo pensiones de miseria, muy lejos de los niveles de las pensiones en Europa, y lo que de verdad necesitan los/as pensionistas no son unos € de más en el bolsillo sino un mercado laboral que aporte más ingresos vía cotizaciones, que las no contributivas salgan de los presupuestos generales del Estado, y que el déficit que haya mientras tanto lo paguen los impuestos de la banca, de las empresas y de las rentas más altas. Los/as pensionistas actuales, pero sobre todo los/as del futuro, lo que necesitan es un sistema público asegurado, unas pensiones dignas y garantizadas y no un parchecito en el bolsillo.
Hay otro anuncio para los y las jóvenes. Esta vez la zanahoria es el complemento salarial de 430 € al mes de “ayuda”, no de salario que es el que cotiza. Y…. ¿qué es este complemento?, pues el dinero público (fondos europeos) que se pagará a cualquier joven que tenga un contrato de formación para “complementar” lo que le pague la empresa. La patronal feliz. Pueden seguir teniendo “trabajadores/as en formación” a SMI y sin coste alguno ya que la empresa tiene bonificadas las cuotas sociales. ¿Alguien ha valorado lo que esta medida va a significar en un mercado laboral como el que tenemos?.
Las zanahorias llegan, también, a trabajadores/as de la función pública estatal para quienes se presupuesta (vinculado a la evolución del PIB) una subida del 1,75 % para el próximo año que, ni de lejos, ayuda a recuperar ese 14 % de pérdida de poder adquisitivo que acumulan en estos años. No se olvidan de las reivindicaciones de las fuerzas y cuerpos de seguridad e incluyen 500 millones de € para iniciar en 2018 la equiparación con las otras fuerzas autonómicas. Tampoco se habla de “reponer” el empleo público recortado durante la crisis.
Finalmente, en un guiño populista, anuncian una semana más de duración del permiso de paternidad, hasta 5, lo que es un pequeñísimo paso que sigue sin acercarnos a la media europea en esta materia y un “cheque” anual de 1000 € a padres y madres con criaturas entre 0 y 3 años para la educación de niños y niñas. No hablan de plazas escolares públicas en estos niveles educativos que es lo más necesario.
Este es un primer análisis que, cuando estén publicados los presupuestos, podremos profundizar más. Pero sirve para empezar a desmontar el profuso ataque mediático que sufriremos y, sobre todo, para explicar el indignante populismo de esta gente y la tomadura de pelo que quieren hacer al personal al que consideran posible comprar por unos euros al mes.
La verdad es que los presupuestos pactados por PP y Ciudadanos son más de lo mismo. Tienen un gasto público y social que está 50.000 millones de € por debajo de la media del gasto público y social de los países europeos.
¡¡Que no te engañen por unos euros de más en el bolsillo¡¡