Este sábado se convoca una marcha en defensa de los manantiales del Moncayo y de los acuíferos superficiales del Rio Huecha

El sábado estaremos apoyando el uso público de agua y defendiendo unos paisajes de gran valor ecológico en el Morana.

Ante la amenaza de privatización de la surgencia de un manantial en la cabecera del río Huecha, vecinos de las cuencas de los ríos del Moncayo demás ciudadanos han organizado una andada. Dos columnas partirán simultáneamente el sábado 28 a las 16:00 horas desde Añón (Puerta del Lugar) y Alcalá de Moncayo (Puerta del Lugar), para confluir en la Fuente de “El Prado”.

Esta marcha pretende ser un primer paso para afianzar una plataforma ciudadana que ya se ha impulsado entre los vecinos de la zona y en las redes sociales. El origen es la solicitud de concesión de un aprovechamiento de aguas públicas, que se sitúa en el polígono 6, parcela 147, en el término municipal de Añón de Moncayo, (Zaragoza), destinado a acuicultura, en las parcelas 150 y 168 del polígono 6.

Desde la Plataforma en defensa de los Manantiales del Moncayo se denuncia la pretensión de privatizar el uso del agua, de una surgencia, conectada con el manantial de la Fuente del Prado, y la acequia de Morana, en la cabecera del río Huecha.

El caudal solicitado, corresponde con el del afloramiento que forma el primer reguero o escorredero, que parte de la Fuente del Prado y que desemboca en la acequia del Hijuelo de Añón, que abastece el regadío, la ganadería extensiva y otros usos tradicionales de Añón, Alcalá, Bulbuente, Borja y Ainzón.

Se trata de una zona hidrológica extremadamente frágil y delicada, con acuíferos muy superficiales, que nutren los manantiales de la cuenca del Huecha, de las que se abastecen de agua de boca Vera y La Mancomunidad de Aguas del Huecha, que gestiona el suministro de aguas a once municipios. También alimenta a las acequias comarcales mancomunadas de riego: El Hijuelo, Las Cuevas y de Morana, de la que a su vez se abastece de agua de boca, Alcalá. Acequias que recorren como arterias portadoras de vida, los regadíos de Añón, Alcalá, Vera, Ambel, Bulbuente, Borja y Ainzón. Son aguas vivas, con truchas autóctonas y berros, que son los mejores indicadores de su calidad biológica.

Las Comunidades de Regantes también se han movilizado en defensa de los usos tradicionales para riego y ganadería. Actualmente está abierta la fase de alegaciones para denunciar los hechos comprobados. Además de registrar esas alegaciones, la plataforma invita “a las personas sencillas a que participen en la labor de defensa del agua, como recurso sostenible, de uso público, comunitario y solidario”.