Si el Gobierno fuera una empresa, la situación sería de quiebra técnica y la consecuencia directa sería el despido inmediato de los desastrosos gestores que la han llevado a este escenario.
Es “escandaloso” el aumento de la deuda pública aragonesa. Es inmoral porque, en definitiva, lo de la deuda pública es “la forma legal de socializar las pérdidas y privatizar las ganancias. Es un trasvase de dinero público a las entidades financieras”. Un esclarecedor ejemplo de este “trasvase de dinero público a manos privadas” son las operaciones de deuda como la última firmada con el Banco Santander. “Es una operación de 350 millones de euros a diez años”. El Santander consigue el dinero del Banco Central Europeo al 0,25 %, se lo presta al Gobierno de Aragón al 3,383 %. (ver cuadro adjunto) El Santander pagará al BCE 6 millones de intereses. El Gobierno de Aragón, por el mismo dinero, pagará al Santander 77 millones de intereses. Negocio redondo pero…. ¿Para quién?
En 2014 la deuda pública será mayor que todo el presupuesto. La política del PP-PAR está llevando a la Comunidad a que no pueda hacer frente a los pagos y obligaciones porque la deuda es superior a los recursos que se tienen.
Esto significará que Rudi, Biel y los suyos nos llevarán a una situación en la que, cada aragonés o aragonesa “tendrá una deuda” de 4.326,79 € y que será así a pesar de que este año, cada un@ de nosotr@s, vía impuestos, vamos a pagar a los bancos 734,49 € en concepto de intereses y amortizaciones.
En la gráfica siguiente vemos la evolución comparativa de la deuda y de los presupuestos generales de Aragón. A nadie, por mínimos conocimientos de economía que tenga, se le escapa que, de seguir así, la deuda se “comerá” absolutamente todo el presupuesto.
Es fácil darse cuenta del desastre.
¿Qué pasaría en una empresa si, en tres años, además de despedir trabajadores, congelar el salario a los que le quedan y dar peor servicio, duplicaran la deuda?. Pues estarían en quiebra técnica, despedirían a los gestores, empezando por el presidente del Consejo de Administración y entrarían en proceso concursal.
Pero como esto ocurre en el Gobierno de Aragón, no se va Rudi, ni Biel, ni ninguno de sus consejeros o consejera. ¡¡Tendremos que echarles!!
Lo cierto es que nos están llevando a la quiebra. En este cuadro se demuestra como ha ido el endeudamiento. Todos estos datos son oficiales, están sacados de los presupuestos. Recordad que Rudi y Biel ganaron las elecciones (porque mayoritariamente les votó la gente) en Mayo de 2011 y gobiernan desde Junio de 2011.
Observad que lo que debemos es ya más que el presupuesto, fijaros que, a finales de 2014, cada aragonés o aragonesa, deberemos 4326 €, fijaros que este año, cada uno de nosotros o nosotras, pagaremos a los bancos 734, 49 €.
Todo esto lo hace un Gobierno que dijo, y sigue diciendo, que controlará el déficit y reducirá la deuda. Todo esto sucede a la vez que nos desmantelan la educación, la sanidad y los servicios públicos, a la vez que quitan becas y ayudas, a la vez que recortan empleo público, … recordad que faltan colegios y hospitales, que no invierten en carreteras,…. recordad que sube la pobreza y que cada vez hay más parad@s sin prestaciones, recordad…., bueno, recordad que hay que echar a esta gente cuanto antes porque nos llevan a un desastre que costará mucho levantar. Pero, sin ninguna duda, ¡¡Los echaremos y recuperaremos lo que es nuestro y están destrozando¡¡
Pero sabemos que hay alternativa, que se pueden hacer las cosas de otra manera, aunque no quieran!.
Para empezar, insistimos en la transparencia, en dar información en no mentir y en gestionar bien, como base de todo Gobierno.
Además de esto “tan básico”, nuestro grupo parlamentario ha solicitado una auditoria de la deuda y reitera la necesidad de realizar una reforma fiscal para que pague más quien más tiene y aumentar la recaudación mediante impuestos a las rentas altas, a las transacciones financieras, gravámenes ambientales, la eliminación de la subvención por seguros médicos privados, entre otras y no pagar la deuda especulativa, es decir, la deuda ilegítima.