Izquierda Unida de Aragón reclama el cierre definitivo y desmontaje de la central de Garoña y denuncia la sumisión del Gobierno al lobby nuclear que significa el Real Decreto aprobado ayer por el Consejo de Ministros para abrir la puerta a la reapertura de Garoña, central nuclear ubicada en la cabecera del río Ebro.

El Consejo de Ministros aprobó ayer un Real Decreto para la Gestión Responsable y Segura del Combustible Nuclear Gastado y de los residuos radiactivos que hace posible que Nuclenor, titular de la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos), pueda pedir la renovación de la licencia antes del 6 de julio. Esta decisión abre la puerta para que la planta pueda volver a operar, según ha anunciado la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáez de Santamaría.

“La decisión tomada por el Consejo de Ministros, declara el Coordinador General de IU Aragón y responsable Federal de Energía, Adolfo Barrena, es anteponer los intereses de Nuclenor, que es la empresa propietaria de la central de Garoña, por encima de la salud y seguridad de la ciudadanía y por eso hacen una norma a la medida de los intereses de Nuclenor”.

“Introducen, de manera tramposa e irresponsable, continua Barrena, disposiciones adicionales y transitorias en la norma aprobada de tal manera que Garoña podrá acogerse a la fórmula de “renovación de la autorización de explotación”. “El “traje a medida”, resalta Barrena, está en la disposición transitoria sexta que se refiere, precisamente, al caso en el que se encuentra la central”.

Sobre esta disposición transitoria, Barrena denuncia que hace referencia a las centrales que, una vez se apruebe este Real Decreto, hubieran obtenido una declaración de cese definitivo de la explotación por razones distintas a las de seguridad nuclear o protección radiológica y les autoriza a solicitar la renovación de la autorización de explotación, siempre que no hubiera llegado a transcurrir un año desde la obtención de declaración de cese”.

Justamente ese es el caso de la central de Garoña. Cesó por vencimiento de la concesión y no “por motivos de seguridad”. “Por eso es evidente la legislación a la carta”, incide  Barrena.

“Claramente se ve que la decisión de reabrirla obedece exclusivamente a intereses empresariales y no a necesidades sociales”, añade el dirigente de IU. Sin embargo, la instrucción de Seguridad IS­22 del Consejo de Seguridad Nuclear para la gestión del envejecimiento de las centrales a largo plazo exige la presentación de un Plan Integral de Evaluación y Gestión del Envejecimiento con tres años de antelación a renovar la autorización de explotación. Por lo tanto, si Garoña aprovecha la “ventaja” que le da este Real Decreto, y consigue la autorización para reabrir, estaríamos ante una actuación que  sería completamente ilegal”.

Sobre esta instrucción del CSN, IU reclama al Gobierno de Aragón que esté pendiente de los trámites sobre la reapertura y le insta a que se oponga frontalmente para acabar, de una vez por todas, con la amenaza que supone para toda la ciudadanía aragonesa y de la cuenca del Ebro tener en el tramo alto del cauce la central nuclear más peligrosa que hay en España”, finaliza el Coordinador de IU Aragón.