Izquierda Unida reclama al Gobierno de Aragón iniciativas que den alternativa al empleo que perderá Calatayud por el cierre de Kimberly Clark.

La multinacional ha decidido cerrar su factoría de Calatayud, en la que trabajan 230 personas, argumentando falta de rentabilidad. Parece claramente contrastable, y así se ha afirmado en reiteradas ocasiones, que no es el motivo económico, ya que la decisión no obedece a causas económicas o productivas, sino a un cambio de estrategia de la compañía estadounidense, que ha decidido abandonar la fabricación de pañales en Europa.

“Eso, -dice Luis Ángel Romero, portavoz de Industria de IU Aragón en las Cortes- ya se sabía desde hace meses, cuando puso en venta la planta”. “Sabíamos, y entiendo que también el Gobierno de Aragón, que el mantenimiento de la actividad pasaba, por tanto, por encontrar un comprador y han sido varias las veces en las que el consejero de Industria e Innovación ha manifestado que las negociaciones iban por buen camino y que había que mantener las esperanzas”, señala Romero.

“La realidad es, como hemos visto, el cierre de la última gran empresa que quedaba en Calatayud y 230 trabajadores y trabajadoras más en el desempleo”, añade. En su opinión, “el consejero de Industria debe hacer algo más que cruzarse de brazos y, por ello, le emplazamos a plantear, con urgencia, una alternativa que permita la continuidad de la actividad productiva y evite la pérdida de esos 230 puestos de trabajo”.

Para ello, el grupo parlamentario de IU Aragón ha presentado dos preguntas al objeto de que detalle, ante el Pleno de las Cortes, las gestiones realizadas y las alternativas que estudia su Departamento.