IU Aragón apoya la celebración de la Semana de Lucha contra los transgénicos y por la Soberanía Alimentaria y hoy, 17 de abril, día en que se conmemora la Lucha Campesina, su candidata al Gobierno de Aragón, Patricia Luquin, reitera el absoluto rechazo de la formación política y social al cultivo de transgénicos y al sometimiento del Gobierno de Aragón a los intereses de las multinacionales del sector,

Luquin recuerda que Aragón es la Comunidad Autónoma donde más terreno se destina al cultivo de transgénicos y, en concreto, a la variedad del maíz MON 810, prohibido en siete países europeos (Bélgica, Gran Bretaña, Bulgaria, Francia, Alemania, Irlanda y Eslovaquia) y “sobre los que ninguna autoridad científica puede garantizar qué efectos tiene sobre aspectos fundamentales como los efectos a largo plazo sobre la salud humana y/o animal o los impactos indirectos o diferidos sobre el medio ambiente”.

Por ello, IU reclama la realización de un estudio del impacto en la salud y en medio ambiente y aboga por la prohibición del cultivo y, además, de ensayos con nuevos transgénicos en nuestro territorio, tales como los que la multinacional del transgénico lleva a cabo en Ejea de los Caballeros, Grañén, Tauste y Zuera. IU apuesta por una política estratégica orientada a potenciar la agricultura ecológica y los productos agroganaderos de calidad y beneficiosa para el medio ambiente, para el empleo y para la salud de la ciudadanía. “Además, este sector se puede convertir en un importante motor de la economía y el empleo en el medio rural aragonés”, informa.

La candidata a presidir la DGA recuerda que su formación política y social está totalmente en contra de los cultivos transgénicos, como ha demostrado en todas las instituciones proponiendo y apoyando las iniciativas para que los cultivos transgénicos dejen de tener en Aragón, España y en la Unión Europea la puerta abierta a su implantación masiva.

En cuanto a Europa, la candidata hace referencia a la importancia de frenar Acuerdo Transatlántico de Comercio e Inversiones (TTIP), porque implicará la entrada de alimentos contaminados por transgénicos no autorizados en la UE. Cabe recordar que la actual legislación europea de transgénicos no admite la presencia de organismos modificados genéticamente no autorizados en la UE, pero tanto EE UU como los lobbies de la industria han presionado para que estas normas se flexibilicen y la UE permita las importaciones de alimentos y semillas mezclados con productos transgénicos, incluso cuando el material transgénico no esté autorizado en la UE. “De esta forma, consumidores y agricultores nunca sabrían si las semillas o la comida que compran están contaminadas por transgénicos”, explica Luquin.

Por todo ello, IU considera muy importantes el desarrollo de actividades como las de la Semana de Lucha, una iniciativa en la que agricultores, ganaderos, ecologistas, consumidores, asociaciones y organizaciones sociales animan a la ciudadanía a que muestre su rechazo a los OMG y a que participen en el conjunto de acciones que se desarrollan por todo el Estado.