La última alternativa del Ayuntamiento para la reordenación del autobús urbano de Teruel no ha tenido en cuenta ninguna de las aportaciones de Izquierda Unida. El Equipo de gobierno ha tirado por el camino fácil: recortar el servicio sin atreverse a corregir errores:

– No sólo no se atreven a ampliar el servicio a todos los barrios urbanos, aprovechando la Vía Perimetral para llegar al Carrel y al Arrabal, como planteábamos desde IU mediante una línea circular, sino que lo eliminan en San Julián o Bajo los Arcos.

– No se atreven a cambiar el esquema tradicional de que todos los autobuses tienen que pasar por Centro, haciendo un tortuoso recorrido, en lugar de optar por concentrar en las Rondas los intercambios de líneas y el acceso al Centro.

– No se atreven a ofrecer el transporte público como alternativa real para los vecinos de los barrios rurales y para los trabajadores del Polígono. Pues con un solo vehículo, que además también reforzará los horarios escolares, parece difícil obtener frecuencias aceptables.

Además, algunos puntos de la propuesta del Ayuntamiento son directamente una burla y una falta de respeto a los ciudadanos:

– Decir que el ascensor de San Julián sustituye al autobús, es lamentable. El ascensor sirve en todo caso a los vecinos de San Julián próximos a él, pero no al resto del barrio ni a otras zonas que van a quedar sin servicio.

– Decir que con un solo vehículo para la línea P, se van a conseguir frecuencias de 15 minutos es, cuanto menos, increíble.

Desde Izquierda Unida insistimos en que todos los ciudadanos de Teruel y sus barrios tienen derecho a la movilidad. Se va a condenar durante 15 años más a la ausencia de transporte urbano a 7 barrios rurales y a varios barrios urbanos.

Es por ello que desde IU nos remitimos a la propuesta que presentamos el 26 de marzo y que ampliamos el 25 de abril, y anunciamos que nuestra postura de entrada a la negociación es la de votar en contra de la propuesta del Equipo de gobierno.