La Resolución de 10 de Septiembre de 2013, de la Dirección General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia, publicada en el BOE el 19 de septiembre, impone el copago de medicamentos a las personas con enfermedades crónicas que precisan del suministro de fármacos sin estar ingresados en los hospitales.

 

Estos enfermos, de cáncer, hepatitis C, esclerosis múltiple o trasplantes, por ejemplo, van a tener que pagar el 10 % de los medicamentos, con un máximo de 4,20 € por envase. Estos medicamentos suelen ser de precio elevado.

 

Estamos ante el enésimo recorte de la Sanidad, en un momento en que los ministros y el propio Presidente del Gobierno de España están viendo ya brotes verdes en la economía, en un momento en que los dirigentes regionales del PP están comenzando a ofrecer rebajas de impuestos.

 

Y este nuevo recorte viene después de haber impuesto el copago de fármacos, con la excusa de que derrochábamos los medicamentos. De nuevo culpabilizar a los perjudicados por su política, para justificarse.

 

Viene después de haber sacado del sistema sanitario a 873.000 personas, después de jubilar anticipadamente a muchos médicos, de no cubrir las vacantes, de sacar del sistema a un montón de medicamentos que tenemos que pagar íntegramente los pacientes.

 

Lo que ocurre es que el copago que hoy denunciamos es injusto, es insolidario pero sobre todo es cruel. Se ceba con los colectivos que más sufren con sus enfermedades.

 

Por todo lo expuesto, desde Izquierda Unida hemos presentado una moción, a debatir en el próximo pleno, para que el ayuntamiento de Teruel rechace el nuevo copago de medicamentos que tienen que soportar los pacientes crónicos en tratamiento ambulatorio, y solicite la revocación de la Resolución de 10 de septiembre de 2013 de la Dirección General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia.