«Queremos que las medidas de austeridad no recaigan sobre los de siempre, la clase obrera». Éste ha sido uno de los objetivos que ha señalado el concejal Raúl Ariza en la rueda de prensa de evaluación de los seis primeros meses de vida del Observatorio de las Contratas de Zaragoza.
El también vicepresidente del Observatorio, Raúl Ariza, ha resaltado que esta herramienta ha servido, por ejemplo, para reducir algunas facturaciones poco claras como las relacionadas con el vandalismo. Ariza ha destacado algunas de las potencialidades de este órgano de participación y transparencia, como que «los propios trabajadores se convierten en inspectores para garantizar el buen servicio que se está prestando». Sin embargo, también ha alertado de que «no es oro todo lo que reluce, puesto que muchas veces nos topamos con que las propias leyes no nos permiten aplicar las recomendaciones que se escuchan en el Observatorio».
«Estamos ante una herramienta con licencia creative commons -ha aclarado Ariza-, de la que otras ciudades ya nos han pedido información».
Ariza ha destacado la mesa de trabajo para la creación de cláusulas sociales en los pliegos de contratación, con el objetivo de que éstas superen «todas las trabas legales, poniendo a Zaragoza a la altura de otras ciudades».
El también concejal de IU ha subrayado que al Observatorio no puede considerársele un órgano de control interno, auditor o fiscalizador de los propios servicios municipales. “Esto no es el SAMA”, ha recalcado.
La Comisión Técnica ha mantenido cuatro reuniones de orientación y seguimiento de las peticiones de información planteadas. Su órgano de gobierno es el Pleno, en el que están representados 35 miembros (representantes de los grupos políticos con representación municipal, representantes sindicales municipales y de las principales contratas, de las entidades supravecinales y asociación de consumidores) , y está presidido por el vicealcalde y consejero de Presidencia, Economía y Hacienda, Fernando Gimeno.
Un total de 53 consultas han sido atendidas por el Observatorio de la Contratación durante el primer semestre de 2013. De ellas, 20 estuvieron relacionadas con las actividades que configuran el objeto del contrato, supervisiones de los servicios municipales y modificaciones de la actividad.
Otras 21 han estado relacionadas con el tipo económico de la gestión del contrato, importes y contenidos de certificaciones, seis para situaciones laborales y otras seis relacionadas con la situación administrativa y las previsiones de futuras contrataciones.