La portavoz de Izquierda Unida en la Diputación Provincial de Teruel, Amor Pascual, pedirá en el próximo pleno que se firme de manera urgente el Convenio «Consorcio Celtiberia» con el Gobierno de Aragón.
En febrero de 2012 fue presentado a dos consejeros del Gobierno de Aragón, Dolores Serrat y Modesto Lobón, el Proyecto Serranía Celtibérica y la creación de un Instituto de Investigación en Teruel para su ejecución.
Tras varias reuniones se consensuaron los estatutos del “Consorcio Celtiberia”, cuya creación fue aprobada por el Gobierno de Aragón el 18 de diciembre de 2012 en Convenio con la Diputación Provincial de Teruel, participando por parte del Gobierno de Aragón, tres consejerías, las correspondientes a los Departamentos de: Educación, Universidad, Cultura y Deporte, Agricultura Ganadería y Medio Ambiente, y Política Territorial e Interior.
A fecha de hoy, la Diputación Provincial de Teruel no ha firmado este Consorcio, a pesar de que no recoge ningún compromiso económico por parte de esta Diputación.
Este tema se llevó a una Comisión de Cultura, Turismo y Bienestar Social, en febrero de 2013, pero fue retirado del orden del día para su estudio y consideración posterior. Hubiera sido prioritaria su inclusión en las Comisiones de Desarrollo Territorial y la de Desarrollo Rural. En este pleno ya se preguntó por este tema, pero la Diputación sigue sin adherirse al Consorcio Celtiberia.
El estudio desarrollado por el equipo que dirige el profesor Francisco Burillo demuestra que el territorio de Serranía Celtibérica podía acceder en el marco de las convocatorias de la UE 2014-20, además de a fondos de despoblación, a los fondos destinados a los territorios de montaña y a zonas rurales remotas.
La ausencia de la firma ha imposibilitado el surgimiento en Teruel del Instituto de Investigación y Desarrollo Rural Serranía Celtibérica, cuya constitución estaba prevista en convenio entre el Consorcio Celtiberia y la Universidad de Zaragoza.
Además, el que no se haya firmado el “Consorcio Celtiberia” ha impedido que el Gobierno de España llevara el Proyecto Serranía Celtibérica a la Unión Europea en las negociaciones de Fondos Europeos para este periodo 2014-20. La UE tiene definidas 6 tipos de regiones con especiales características para recibir subvenciones. Y dado que el presidente Rajoy consiguió ayudas especiales para territorios españoles que sólo corresponden a un tipo de región, caso de Canarias (región insular) y Ceuta y Melilla (región transnacional), lo hubiera conseguido para el territorio de Serranía Celtibérica, pues es el único de la UE que se adscribe a tres tipos de regiones (montañosa, rural remota y extrema despoblación).
Ahora, todavía queda la opción de que Serranía Celtibérica pueda ser considerada por el Gobierno de España como una Inversión Territorial Integrada (ITI), para recibir Fondos Europeos 2014-2020.
La Serranía Celtibérica, que se extiende por las CC.AA. de Aragón, Castilla La Mancha, Castilla León, La Rioja y Comunidad Valenciana, tiene una extensión de 65.825 km2 (4.769 km2 más que el doble que Bélgica), 499.186 habitantes censados y una densidad de 7,58 hab por km2. Densidad sólo comparable con la Zona Ártica de la Unión Europea, pero con el índice de envejecimiento mayor de la UE y la tasa de natalidad más baja. Es, además, una región montañosa y zona rural remota. Esto es, reúne tres de los seis requisitos de las regiones que la UE considera prioritarias en el reparto de los Fondos Europeos (Las restantes son las transfronterizas, las insulares y las periféricas). Lo cual convierte a la Serranía Celtibérica como territorio prioritario para aplicar una Inversión Territorial Integrada (ITI).
El pasado 18 de julio de 2014 las Cortes de Aragón tomaron el siguiente acuerdo: «La puesta en marcha de manera urgente de las acciones y medidas contempladas en el proyecto de Serranía Celtibérica para combatir la despoblación».
Si bien el Gobierno de España ya ha enviado a la Unión Europea el Acuerdo de Asociación de España 2014-2020, en el que señala los cuatros territorios elegidos como ITI, abre la posibilidad de incluir otros nuevos que reúnan circunstancias especiales, como sería la Serranía Celtibérica.