El consejero de Presidencia y Justicia, Roberto Bermúdez de Castro comparecerá mañana a petición del grupo parlamentario de IU Aragón en la Comisión de Economía y Empleo. El objeto de la solicitud es conocer de primera mano la situación económica y la deuda del grupo ARAMON y el proceso de restructuración de su plantilla.
Cabe recordar que Izquierda Unida reclamó esta comparecencia este verano, tras el cambio producido en el Consejo de Administración del holding de la nieve. Cambio que, para la formación política y social, constató el fracaso del Gobierno de Aragón en la gestión de la empresa pública y que conllevó el nombramiento de Bermúdez de Castro, junto con el del consejero de Hacienda, José Luis Saz, y el exconcejal del PP en el Ayuntamiento de Zaragoza, José Luis Santacruz, bajo la “excusa de darle un mayor peso político al Consejo de Administración de Aramón”. “No compartimos esta decisión”, señala el portavoz de Economía y Empleo de IU en las Cortes, Luis Ángel Romero, quien recuerda que el Partido Popular siempre “se ha regido por incorporar técnicos a las sociedades públicas en detrimento de políticos y ahora este cambio, además de no compartirlo porque politiza el Consejo de Administración, nos preocupa”.
“Queremos que mañana el consejero nos explique el porqué de estos cambios en un corto plazo de tiempo y que despeje cuál es el plan de gestión y de futuro para esta sociedad”, anuncia Romero.
A Izquierda Unida le preocupa el futuro de la nieve por su contribución al desarrollo económico de Aragón, especialmente de la provincia de Huesca. En este sentido, el diputado de IU advierte que “el crecimiento de la deuda del grupo aragonés de la nieve en los últimos años bloquea sus posibilidades de futuro y demuestra que se ha hecho una pésima gestión que contribuye a aumentar el déficit de nuestra Comunidad autónoma”.
“Bermúdez debe explicar en sede parlamentaria cuál es la situación real de Aramón, participada al 50% por Ibercaja y por el Gobierno de Aragón”, reitera. Para Romero, la situación financiera de Aramon se debe a que basaron su desarrollo económico en operaciones inmobiliarias basadas en la especulación urbanísitica, como el proyecto de ampliación de Cerler por el valle de Castanesa. Además, expresa su preocupación por el plan de eficiencia proyectado a raíz de la auditoría realizada, dadas las repercusiones que podría tener para el empleo en la zona, y defiende un modelo de gestión que apueste por la sostenibilidad frente a la especulación.
“La deuda financiera del grupo se deriva de un proyecto fallido que hizo primar las operaciones especulativas sobre inversiones sostenibles”, por lo que IU reclama la paralización de los proyectos urbanísticos y un replanteamiento del modelo de gestión de la sociedad pública.