La Comisión de Ciudadanía y Derechos Sociales de las Cortes de Aragón instan al Gobierno autonómico a reactivar el servicio de Atención Temprana suspendido por el Estado de Alarma tras aprobar por unanimidad nuestra iniciativa.

A través de esta proposición no de ley, el Ejecutivo aragonés deberá diseñar con celeridad, junto a las entidades implicadas, un plan de reactivación del servicio que se adapte a la situación actual de confinamiento, tendrá que establecer un mecanismo de coordinación entre las entidades de atención temprana que puedan identificar necesidades de cara a la propuesta de programas concretos a poner en marcha si se alarga la cuarentena y reforzar y reorientar la coordinación con los servicios de atención a la infancia y la coordinación con educación para poder apoyar el trabajo clínico y de rehabilitación desarrollado con los ACNEs y aprovechar al máximo los recursos en la gestión de la crisis.

Presentamos esta iniciativa parlamentaria ante el cierre de los Centros de Desarrollo Infantil y Atención Temprana (CDIATs) de las entidades contratadas, que provocó la suspensión del contrato de servicio público que tiene el Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) con dichas entidades prestatarias, así como el cierre del Centro de Atención a la Infancia (CATI) del IASS. “Los niños y sus familias han quedado sin poder recibir la atención que requieren y el confinamiento no hace sino complicar más la situación de estos niños con dificultades, además de que el tiempo perdido en Atención Temprana no se recupera”, ha explicado en su intervención nuestro portavoz parlamentario, Álvaro Sanz.

“De hecho, -ha continuado- después de Semana Santa, muchas de las entidades que llevan a cabo este servicio establecieron por su cuenta unos equipos de seguimiento de familias a causa de las demandas que les llegaban por parte de estas”. Muchos de estos profesionales también han seguido en contacto telemático con familias dando instrucciones o facilitando pautas, resolviendo necesidades y “ha sido compromiso de las entidades que prestan la atención mantener el contacto con las familias desde que se suspendió el contrato por parte del IASS”, ha señalado el diputado.

Cabe destacar que el 8 de abril, ARASAT, la Asociación Aragonesa de Atención Temprana, hizo llegar al Departamento del ramo un escrito en esta misma línea y el 20 de abril un documento con una propuesta concreta por parte de las diferentes entidades con quienes tienen concierto, recogiendo actuaciones que han ido llevando a cabo de forma voluntaria.

La población a la que se dirige el servicio es “vulnerable por definición”, dado que son menores con alteraciones de desarrollo para los que “el factor tiempo es de gran importancia”. Por otro lado, ja explicado Sanz, la intervención con la familia en el Programa de Atención Temprana constituye desde el inicio una de las áreas de intervención fundamentales, tanto por su papel en el desarrollo del menor, como objeto de intervenciones que faciliten su equilibrio funcional y emocional, “más aún en esta situación extraordinaria de confinamiento”.

En cuanto a los datos, en Aragón, desde la Orden de 2003 relativa a la puesta en marcha del Programa de Atención Temprana público, responsabilidad del IASS, han pasado 9.488 niños y niñas y sus familias. En la actualidad cuenta con 25 Centros de Desarrollo Infantil y Atención Temprana y 282 profesionales que atienden a 2.042 menores y a sus familias (cifras actualizadas a fecha de la celebración del Día de la Atención Temprana 15 de abril de 2019).

Consideramos que, aunque la situación sea excepcional y que hay muchas prioridades, esta población requiere ser atendida y por ello hemos planteado esta proposición no de ley: para atender y dar respuesta a las necesidades de estos niños y niñas y sus familias y que los profesionales puedan dar continuidad a su labor manteniendo sus puestos de trabajo. “De esta crisis estamos aprendiendo muchas cosas y una de ellas es la importancia de los cuidados y de situar a la vida en el centro de las políticas”, ha concluido Sanz.