Izquierda Unida ha solicitado información al Gobierno de Aragón en relación las aplicaciones institucionales de Atención Primaria. En concreto, su portavoz, Patricia Luquin, ha pedido al consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, que explique si tiene conocimiento de los problemas de funcionamiento de este servicio que desde hace un tiempo se denuncian.

Concretamente, desde hace más de 3 años, se ha observado una progresiva degradación en la velocidad de ejecución de la aplicación OMI-AP de los sectores de Zaragoza 2 y 3. De ese tiempo a esta parte, la diputada de IU señala que, lejos de solventarse este problema, “la lentitud se ha agudizado con lo que supone de pérdida de tiempo al no poder consultar expedientes o bien a la lentitud a poder acceder a historias clínicas de pacientes en el ya escaso tiempo (minutos) de atención a los y las pacientes en atención primaria”.

Hace un tiempo desde el Centro de Gestión integrada de proyectos corporativo (Tecnologías y Sistemas de Información), además de reconocer la situación y conocer el problema, se señaló que en el plazo de 12 meses, a contar desde abril del 2015, se acometerían las mejoras necesaria para solucionar un problema que afecta de forma directa en la calidad de la asistencia de los y las pacientes del Servicio Aragonés de Salud.

“Van pasando los meses y la lentitud y mal funcionamiento de las aplicaciones institucionales de Atención primaria siguen solucionarse”, lamenta Luquin quien ha preguntado a Celaya si su Departamento tiene conocimiento de esta situación y del informe relativo a misma. Además, IU pide al consejero que explique qué tipo de actuaciones se han acometido o se piensan poner en marcha para solventar dicho problema y cuándo y en qué plazo tiene previsto solventarlo.

Otra de las cuestione que plantea Luquin en la pregunta enviada a Celaya es la situación se encuentra la normalización de los procesos y criterios de identificación en todos lo ámbito y centros, sobre la que pide que la explique junto con las medidas adoptadas para evitar la duplicidad de los expedientes de historias clínicas con el grave perjuicio que supone dicha duplicidad.