“Exigimos al Gobierno de Aragón que rechace la colaboración público-privada en la construcción del nuevo hospital comarcal de Alcañiz y adopte todas las medidas precisas, incluidos los trámites administrativos necesarios, para iniciar su construcción con recursos propios y, por tanto, garantizar su titularidad pública, así como la gestión directa del mismo”, señala la portavoz de Sanidad de IU, Patricia Luquin, quien presentará esta reivindicación a través de una PNL mañana en el Pleno de las Cortes.

“Es necesario que los partidos que sustentan el Gobierno, PP y PAR, aclaren su posición sobre este asunto en sede parlamentaria y aseguren, con el voto a favor de nuestra iniciativa, que el hospital nuevo de Alcañiz no se privatizará”, asevera Luquin, para recordar que “el consejero de Sanidad anunció, durante la visita a los terrenos donde se ubicará el hospital, que su construcción se realizará a través de la colaboración pública-privada, lo que supone, de hecho, la privatización del hospital”.

Luquin advierte que “la necesidad de un nuevo hospital público en Alcañiz es una reivindicación histórica de la ciudadanía bajoaragonesa dada la obsolencia del actual centro sanitario y la creciente demanda asistencial”. “El rechazo por gran parte de la ciudadanía, partidos políticos, organizaciones sindicales, vecinales y sociales, a la construcción mediante la colaboración público-privada del hospital de Alcañiz es una realidad”, dice y apunta que “se sigue demandando la necesidad de un nuevo hospital pero que, tanto su titularidad como su gestión, sean directas y públicas».

“Mañana presentaremos esta iniciativa en las Cortes –continua- porque es necesario que el Gobierno rechace la colaboración público-privada en la construcción del nuevo hospital, ya que las medidas que aplica están provocando al desmantelamiento del servicio público sanitario en aras de su privatización”.

“La fórmula de la colaboración público-privada –explica- ha fracasado, tal y como se constata en otras Comunidades Autónomas, que aplicaron este modelo hace tiempo: no hay más que ver cómo se encuentra, en la actualidad, la sanidad en Madrid o Valencia”. En este sentido, Luquin denuncia que “la privatización de la sanidad supone hacer negocio (para unos pocos) con el derecho a la salud y ya ha quedado demostrado, con cifras y con hechos, que esta fórmula cuesta millones de euros a las arcas públicas y ni es más eficiente ni más eficaz ni más barata que la sanidad pública”.

Izquierda Unida continúa su trabajo en la calle y en las instituciones en defensa de la sanidad pública, “porque garantiza la atención sanitaria en condiciones de equidad, accesibilidad y universalidad y con gran nivel de calidad en la prestación”, concluye.