“El derecho a una muerte digna tiene que ser tan importante como el derecho a una vida digna”, así lo ha manifestado nuestra portavoz en las Cortes, Patricia Luquin, quien hoy ha comparecido en rueda de prensa junto con la Asociación Derecho a Morir Dignamente en Aragón, y la portavoz de Sanidad del grupo de Podemos, Itxaso Cabrera, para presentar una iniciativa parlamentaria que mañana se debatirá en la sesión plenaria del parlamento aragonés.

En concreto, presentaremos una proposición no de ley que busca impulsar la Ley de derechos y garantías de la dignidad de la persona en el proceso de morir y de la muerte, más conocida como Ley de Muerte Digna, que fue impulsada por nuestro grupo parlamentario y aprobada en 2011 por las Cortes de Aragón.

Es un hecho que cada vez hay más personas que solicitan el uso de la eutanasia y es obligacikón del Gobierno de Aragón poner en funcionamiento esa ley al 100% porque tiene mucha potencialidad y porque es una demanda social.

En la iniciativa reclamamos la difusión, por parte de la Administración, de la existencia de la declaración de voluntades anticipadas. Un derecho que, según Luquin, hay “muchas y muchos aragoneses que desconocen, por lo que no se puede garantizar una ley si no se sabe qué derechos hay reconocidos en ella”. Además, consideramos imprescindible que se amplíe la formación a las y los profesionales sanitarios y que se implante en el Salud un protocolo de sedación terminal que contenga un plan de actuación.

Asimismo, nuestra diputada ha incidido en la necesidad de que las y los profesionales puedan manifestar su objeción de conciencia a respetar la decisión del paciente. Una decisión que deberán comunicar a sus jefes para que se garantice el ejercicio de sus derechos.

Otro de los puntos que recoge la iniciativa es lograr que las instituciones que no tienen competencias para modificar el Código Penal, tomen postura e insten a quién sí que pueden modificarlo, como es el caso del Gobierno central, porque uno de los objetivos de la propuesta es que se regule la solicitud y la práctica de la eutanasia en la Comunidad.