Izquierda Unida de Aragón respalda las movilizaciones convocada hoy miércoles, 16 de marzo, en repulsa al acuerdo entre la Unión Europea y Turquía sobre los refugiados, como la organizadas a las 18.30 h en Zaragoza ante la delegación del Gobierno en Aragón, en Huesca en la plaza de Navarra y en Teruel, en la plaza del Torico. Así como la convocada en la plaza de España de Alcañiz a las 19.30 h.

La delegación de IU que se sumará a la concentración de Zaragoza estará encabezada por su portavoz en las Cortes, Patricia Luquin, y por su Responsable de Organización, Álvaro Sanz, quien ayer participó en nombre de IU en la rueda de prensa convocada por sindicatos, partidos y organizaciones sociales para informar de la movilización.

Para Sanz, el preacuerdo alcanzado entre la UE y Turquía por el cual a cambio de 6.000 millones de euros hasta 2018 las personas refugiadas van a ser devueltas a Turquía es un “despropósito” y una “vergüenza”.

Este “insolidario” acuerdo, que se pretende aprobar en el Consejo Europeo de los próximos 17 y 18 de marzo, “atenta contra los Derechos Humanos y el derecho de asilo que parecía justo conceder hace solo seis meses”, explica Sanz quien reitera que “al devolver a Turquía a las personas refugiadas y migrantes que alcancen territorio de Grecia se les priva de la posibilidad de pedir asilo en la UE, lo que va en contra de la Convención de Ginebra”.

“La UE opta claramente por la xenofobia y el racismo institucional como política pública europea, algo muy peligroso que acaba impulsando xenofobia social  y el neofascismo, como se ha podido ver en las elecciones regionales en Alemania y antes en otros países como Francia, Holanda, Dinamarca, Suecia o Hungría”, señala Sanz para quien el silencio del Gobierno central demuestra “una nula voluntad política para impulsar realmente acciones positivas como las de acogida solidaria”.

Por su parte, la diputada Patricia Luquin denuncia que “los jefes de Estado y Gobierno de la UE han decidido institucionalizar las devoluciones en caliente y, tras haber propiciado que fracasara el plan de reubicación, ahora se desprenden del problema mandando a decenas de miles de personas a un agujero negro como Turquía, donde el respeto por los derechos humanos brilla por su ausencia”.

Luquin destaca que “el millón y medio de refugiados apenas supone un 0,1% de la población total de la Unión y pueden ser integrados plenamente con una política de cuotas solidaria por países, junto al impulso de políticas públicas de acogida e integración social”.