“El Gobierno de Aragón debe defender la competencia exclusiva de la Comunidad Autónoma recogida en el punto 25 del artículo 71 del Estatuto de Autonomía”, manifiesta el portavoz de Economía y Empleo de IU en las Cortes, Luis Ángel Romero, en relación con las medidas anunciadas ayer por el Ejecutivo central. Unas medidas con las que pretende elevar de ocho a diez el número mínimo de domingos y festivos en los que puede abrir el comercio y ampliar de 72 a 90 las horas semanales (en días laborables) de apertura de las tiendas. El artículo al que se refiere el diputado de IU Aragón establece que es competencia exclusiva de la Comunidad Autónoma la regulación de la actividad comercial, incluidos los horarios y equipamientos comerciales.
“El Estatuto es una ley orgánica, aprobada en las Cortes y ratificada en el Congreso y en el Senado, y ni Aliaga ni el Gobierno central pueden modificar la ley a su antojo”, asevera Romero, quien critica las declaraciones del consejero de Industria, quien ha señalado que “la aplicación de la medida deberá pactarse con los agentes implicados en el Observatorio del Comercio Aragonés”.
Cabe recordar que en Aragón rige la actividad comercial la Ley 7/2005, de 4 de octubre y establece en ocho el número de domingos y festivos en los que los comercios de la Comunidad podrán permanecer abiertos al público. Además, el pleno de las Cortes, celebrado el 1 de diciembre de 2011, aprobó una Proposición no de Ley de IU Aragón por la que instaron al Gobierno autonómico que tenga en cuenta, como criterio prioritario, los intereses de usuarios y consumidores sin que en el calendario puedan incluirse ni los días 1 y 6 de enero, 23 de abril, 1 de mayo, 12 de octubre, 6 y 25 de diciembre. Además, la iniciativa incluía que el Ejecutivo no contemple como día de apertura autorizada ningún domingo ni festivo de los del mes de agosto, no autorice la apertura de dos días festivos consecutivos y respete la autonomía municipal.
Sobre este último punto, en cuanto al ámbito municipal, Izquierda Unida también denuncia la medida anunciada vulnera la autonomía local. El portavoz del grupo municipal de izquierdas, José Manuel Alonso, se posiciona en contra de la orden del Gobierno por la que Zaragoza deberá delimitar, en un plazo de seis meses desde la aprobación de la normativa, las zonas que consideren de gran afluencia turística y la que se liberalizará los horarios comerciales.
Además de subrayar que el pleno municipal ya rechazó ampliación de horarios, Alonso insiste en que supondría la “ruina para el pequeño y mediano comercio y la desertización de la ciudad”. “La legislación vigente está pensada para aplicarse globalmente en municipios que viven del turismo, pero no es el caso de Zaragoza”, apunta el portavoz municipal. “El modelo de ciudad por el que apuesta IU es el del comercio de proximidad, en la que los desplazamientos en coche se reduzcan todo lo posible y en la que los trabajadores tengan unos horarios razonables”, subraya. “La crisis no debe ser un pretexto para la precarización de las condiciones laborales”, añade. Alonso considera necesario invocar el derecho de los consumidores y usuarios pero, también, el derecho de los trabajadores y trabajadoras del sector a la conciliación de la vida familiar y laboral.