Cuando el equipo de Gobierno del PP-PAR, presentó su propuesta de presupuesto para el año 2015 desde IU dijimos que era un presupuesto que venía marcado, muy marcado, por una decisión política en cuanto a cómo gestionar la política recaudatoria del Ayuntamiento de Huesca, la política fiscal, porque es un presupuesto que se ve afectado muy seriamente por esa rebajas fiscales que vienen aplicando ya desde el año 2012, que son insignificantes para las familias, para la economía de la ciudadanía oscense, unas rebajas que además son injustas porque son lineales y favorecen a las rentas más altas y perjudican a las bajas, y unas bajadas fiscales que lo que único que consiguen es condicionar y perjudicar la capacidad del Ayuntamiento a la hora de implementar políticas de distintos tipos.
En cifras concretas en este año 2015, de no haberse producido estas bajadas el Ayuntamiento podría disponer de un 1.700.000€ más para implementar programas, y si lo calculamos para todo el mandato el Ayuntamiento habría podido disponer de 4 millones de euros más, eso simplemente habiendo congelado el IBI, por tanto que el presupuesto para el 2015 disminuya en 3 millones de euros es fruto de una decisión política del PP y del PAR.
Las consecuencias que ha traído consigo esa política recaudatoria del PP están claras, el PP permanece instalado en esa filosofía fiscal a consecuencia de ello, y porque no son sus prioridades, llevamos todo un mandato sin que el tema del empleo se afronte de una manera seria en la ciudad, llevamos un mandato en el que la política social que se está implementando es tímida y no es acorde a la realidad social que se está viviendo y llevamos un mandato en el que paulatinamente en el que la capacidad inversora va siendo cada vez menor y ahora estamos viendo que prácticamente la inversión de este 2015 se basa únicamente en el urban.
En IU seguimos insistiendo en lo que es nuestro proyecto político, nuestra idea de ciudad y nuestro planteamiento a la hora de elaborar un presupuesto. El presupuesto es la herramienta de la que se dota un gobierno para llevar a cabo sus políticas y por lo tanto lo que se plasma en un presupuesto es el programa de gobierno. Y esto consiste en otra política recaudatoria, hablamos de justicia fiscal, de medidas progresivas, de que pague más quien más tiene y lo que pretendemos es que el Ayuntamiento pueda mantener ingresos suficientes para realizar políticas activas en todos los ámbitos. Esto por el lado de los ingresos, a la hora de distribuir el gasto hacemos un planteamiento distinto al del equipo de Gobierno, situando el tema del empleo en primer lugar, reflejamos partidas para un cambio de modelo productivo en el que hablamos hacía que sectores querríamos orientar la economía en la ciudad, hablamos de lucha contra la precariedad, porque seguimos hablando de servicios públicos cuando hablamos de empleo, hablamos de empleo digno y con respecto a la política social, lo que intentamos plasmar con nuestras enmiendas es dar respuesta real y acorde a la situación que se está viviendo y respuesta real en cuanto a que es el Ayuntamiento, las administraciones públicas, quienes tienen que ser garantes de los derechos de los ciudadanos y ciudadanas. (Se adjuntan la propuestas en el pdf.)
Por ese motivo, porque partimos de un planteamiento opuesto en cuanto a gestionar los ingresos y distribuir el gasto hemos planteado una enmienda a la totalidad, no asumimos el condicionante previo que parte de las ordenanzas fiscales del Gobierno del PP si no que plasmamos lo que podría ser la recaudación si se aplicaran nuestras medidas y desde luego cambiamos la prioridades a la hora de distribuir el gasto, por lo que esta enmienda a la totalidad lo que supone es un modelo de gestión rotundamente distinto.
Por lo que no aceptamos el punto de partida con los ingresos que propone el equipo de gobierno y no aceptamos tampoco la orientación en cuanto a la distribución del gasto porque olvida hablar del futuro en cuanto al tema de empleo en esta ciudad, de a qué sectores hay que mirar y poner toda la carne en el asador, y este equipo de gobierno ha perdido la oportunidad durante todo el mandato de hacerlo, en contra de eso lo que está haciendo es fomentar la precariedad laboral, con el tema de la privatización que una de sus graves consecuencias es la precariedad.
Este es el último presupuesto del mandato y esperemos también sea el último de este de Gobierno municipal porque esta ciudad necesita cada vez de manera más urgente afrontar estas cuestiones desde un punto de vista político e ideológico totalmente inverso al que estamos viendo.