El Grupo Comarcal Izquierda En Común en la Ribera Alta del Ebro ha lamentado de nuevo la pérdida de dos nuevas vidas en los accidentes ocurridos este martes en la N-232, en los términos municipales de Boquiñeni y de Pedrola, y ha vuelto a exigir el desdoblamiento de esta carretera nacional y la liberalización de la AP-68, en el tramo Alagón-Tudela
José Vera, consejero de Izquierda En Común y Vicepresidente 4º de la institución comarcal considera “prioritario el desdoblamiento en los tramos de la N-232 que atraviesan nuestro territorio con el afán de garantizar la seguridad del tráfico de personas y mercancías, evitando los desgraciados accidentes que tristemente acontecen con demasiada frecuencia en los tramos zaragozanos de la N-232”.
“Nuestra primera apuesta en el tramo norte de la N-232 ha sido siempre la de liberalizar la AP-68 entre Alagón y Tudela puesto que esta alternativa, aparte de la más económica, es la solución más rápida, lo que conllevaría reducir el número de accidentes y de víctimas en un tiempo récord”, continúa Vera, “pero somos conscientes de que además es necesario el desdoblamiento en ese tramo, ya que es una gran zona industrial de nuestra provincia en la que Opel y auxiliares concentran un gran número de desplazamientos”.
Sin excusas
Al respecto, Pedro González, consejero comarcal de Izquierda En Común y concejal de IU en Pedrola, uno de los municipios más afectados, ha subrayado que “la liberalización de la autopista, mientras se realizan las obras de desdoblamiento, es la opción perfecta para todas las personas que nos jugamos la vida cada día en esta carretera”. “Eso haría que la N-232 quedara mayoritariamente despejada de tráfico pesado, el que más problemática genera, que tomaría la opción más segura y rápida”, recalca González.
González ha considerado que “tanto el Gobierno de España como el Gobierno de Aragón no pueden escudarse continuamente en la actual crisis financiera en la que estamos inmersos para no hacerse cargo de sus responsabilidades, que, en este caso y debido a su falta de sensibilidad, generan una situación de vida o muerte para las personas que discurren por la N-232”. Al respecto, ha reclamado que se ejecuten las obras de desdoblamiento “sin excusas y con la mayor celeridad posible, puesto que estamos hablando de vidas humanas y, esa falta de compromiso, los hace corresponsables en la pérdida de cada una de ellas”.