La portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Huesca, Pilar Novales, considera que ha llegado el momento de resolver el contrato con la empresa adjudicataria de la limpieza viaria FCC, y así acabar de una vez con el fiasco que ha supuesto esta privatización.

Tras haberse confirmado que la empresa ha sido incapaz de establecer unas condiciones laborales dignas y forzar una convocatoria de huelga, es hora de que el equipo de gobierno salga de su permisividad con esta empresa y tome medidas definitivas. Hay hasta 25 posibles incumplimientos que pueden ser causa de resolución de contrato.  El Ayuntamiento sólo tiene que confirmarlos y tomar las medidas oportunas. El incumplimiento en materia de higiene y salud laborales en las instalaciones, el no haber realizado algunos de los servicios en las fechas comprometidas (polígonos industriales), el haber proporcionado menos operarios en algunos turnos, por citar algunos ejemplos, son casos claros y de fácil comprobación de los que no se ha proporcionado todavía información alguna.

Si ahora, con la grave situación provocada por un conflicto laboral que FCC nunca ha querido resolver, no toma medidas drásticas,  habrá razones para pensar que hay extraños intereses, pues al equipo de gobierno se le están acumulando las cosas por aclarar, desde la batería de posibles incumplimientos hasta el hecho de que en la mesa de contratación pasara desapercibido que FCC presupuestara salarios por debajo del SMI y ganara la oferta así. Lo que está claro es que el interés por preservar el servicio, que es el que debería motivar al gobierno municipal, no se ve por ningún lado, y es increíble que no haga nada.

Esta empresa, que utiliza continuamente la trampa y el engaño, tanto con los trabajadores como con el propio Ayuntamiento, no merece ni un minuto más de tiempo. Exigimos al equipo de gobierno que presente inmediatamente los informes sobre los incumplimientos constatados y que resuelva el contrato. Es hora de que se dé fin a lo que ha sido un total despropósito, la privatización de  la limpieza viaria y se opte por volver a darle una fórmula 100% pública. En este sentido, una posibilidad que la Alcaldía ha llegado a contemplar en algún momento, es la encomienda de gestión a la empresa pública GRHUSA, que podría hacerse además,  y así lo exigiremos, subrogando la plantilla actual.

11112Desde Izquierda Unida mostramos nuestro total apoyo a los trabajadores de FCC, que están luchando de una manera admirable por su dignidad como trabajadores. En unos tiempos en que la precariedad y la degradación del trabajo se expanden gracias a la desastrosa legislación laboral y a la total impunidad de la que parecen gozar las grandes empresas como ésta, los trabajadores de FCC están dando un enorme ejemplo de entereza, de unidad y de lucha por sus derechos.