El grupo municipal también expresó su oposición a la manera en la que se está llevando a cabo la “peatonalización” de la calle Mediavilla en el Casco Viejo. Desde IU se insiste en que ha sido “improvisada, sin prever aparcamientos disuasorios, comercios instalados u oficinas públicas que den vida a la calle”
Izquierda Unida ha reivindicado, una vez más, la mejora del funcionamiento de las residencias para personas mayores. Esta vez, con motivo del debate del estado del municipio, el portavoz del grupo municipal, Ismael Sanz, volvió a denunciar “la falta de control público” que conlleva que la residencia Virgen de la Oliva esté recibiendo productos del Banco de Alimentos “cuando la contraprestación social que ofrece es mínima, con sólo una o dos personas que acuden a comer cada día”. En este sentido, Sanz volvió a reivindicar “el papel fiscalizador del Ayuntamiento en el patronato de la entidad, un papel al que no se debería haber renunciado”.
Desde los escaños de IU también se trasladó al pleno la preocupación por la Residencia Elvira Otal, reclamando “una plaza de dirección pública, estable y cualificada, así como servicios de enfermería que hasta ahora se vienen prestando por auxiliares”. Otras de las demandas de Izquierda Unida ha sido que se cubran las bajas y vacaciones, puesto que desde verano no se ha hecho.

Paralización de las obras en la calle Mediavilla
Los ediles de IU también destacaron durante el pleno del debate del estado del municipio los errores que se han cometido en el intento de peatonalización del Casco Viejo de la Villa. “Desde Izquierda Unida siempre hemos apostado por que los peatones tengan un papel central en la movilidad, pero el Consistorio ha procedido de manera improvisada, sin prever aparcamientos disuasorios, comercios instalados u oficinas públicas que den vida a la calle”, señaló Ismael Sanz. Asimismo, insistió en la necesidad de “hacer una evaluación seria sobre la decisión de cortar al tráfico Ramón y Cajal, que no peatonalizarla, puesto que, lamentablemente, se ha convertido en un desierto”. De este modo, Izquierda Unida solicitó formalmente “que paren las actuaciones, abran al tráfico Mediavilla y convoquen una reunión abierta, como las que se hicieron para aprobar en su día el PICH, para que la gente pueda expresar su punto de vista”.