Desde el grupo municipal de izquierdas, el concejal Pablo Muñoz insiste en que se está vulnerando el Plan Especial del Galacho y sus indicaciones de desviar el camino que discurre junto a los escarpes, en lugar de provocar desprendimientos artificiales.
El portavoz en materia del Medioambiente del grupo municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Zaragoza, Pablo Muñoz, ha denunciado hoy los “graves daños producidos a un espacio de especial protección como son los Escarpes del Ebro”. No en vano, esta formación ya solicitó el pasado año la recuperación de parte de los suelos de los Escarpes ocupados por el campo de maniobras de San Gregorio para su uso turístico y cicloturístico dado su alto valor ecológico.
Los daños, según ha tenido conocimiento este grupo, se han producido recientemente cuando desde el área de Patrimonio y Contratación se ha dado la orden de entrar con las excavadoras y desmontar el Escarpe por un supuesto riesgo de desprendimiento.
Según el concejal de Izquierda Unida “una actuación así demuestra el nulo conocimiento de un terreno compuesto por yesos como es el Escarpe que en su propia esencia contiene el que se produzcan estos desprendimientos y que dicha actuación no cuenta con informe alguno del servicio de Medioambiente”.
En este sentido Muñoz ha exigido que “se paralice la obra de desmonte del Escarpe” y que se valoren las medidas que se habían previsto desde el propio servicio de Medioambiente como el desvío del Camino o la señalización de la zona en consonancia con el Plan Especial del Galacho al que define como un lugar de protección preferente.
“El Ayuntamiento de Zaragoza debe velar por la protección de este espacio, adaptando el camino al relieve y no al revés”, concluye Muñoz.