Barrena ha calificado la actuación policial de “desproporcionada” teniendo en cuenta que la concentración  –amparada por el texto constitucional- ha discurrido por cauces absolutamente pacíficos por lo que se trata de una “extralimitación absoluta del uso de la fuerza por parte de la policía nacional”. Adolfo Barrena ha exigido conocer “cuáles han sido las directrices políticas que han desencadenado tal acción” y ha pedido “qué se depuren responsabilidades”.

En este sentido, Barrena ha exigido que se abra un expediente sancionador al jefe del operativo de la policía nacional por las manifestaciones y el acometimiento físico proferido contra Raúl Ariza, miembro de la dirección Federal de Izquierda Unida y concejal del Ayuntamiento de Zaragoza. Según ha explicado Ariza, cuando ha tenido conocimiento de la detención de varias personas,  se ha personado en el lugar de los hechos con el fin de conocer el paradero de las personas detenidas. Para ello, se ha dirigido al Jefe del operativo respondiéndole éste con empujones y manifestándole que “el acta de concejal se la pasaba por el forro”, a lo cual Ariza le ha solicitado la identificación, puesto que  muchos agentes no portaban el número de placa legalmente exigible, volviéndole a manifestar el Jefe del operativo que  “ya lo conocía y que sabía que les estaba provocando muchos problemas” en relación a la exigencia por parte de Izquierda Unida en el pasado pleno municipal del Ayuntamiento de Zaragoza de que la Policía Nacional llevara visible la identificación como exige la ley.

“Una persona con tal agresividad  no puede estar al frente de un cuerpo de seguridad” ha manifestado Ariza. Por ello, Barrena ha solicitado la apertura de un expediente sancionador y la retirada cautelar de la actividad en la calle de dicho funcionario y de sus funciones del control del orden público. Del mismo modo Ariza ha manifestado que “esta persona empaña la actuación del cuerpo nacional de policía” y ha solicitado la “solidaridad de los sindicatos policiales para que denuncien estas malas prácticas que poco ayudan al trabajo de los cuerpos de seguridad”.