Hoy hemos convocado un minuto de silencio en todas las convocatorias y actos electorales organizados en Aragón en solidaridad con las familias y amistades de los dos trabajadores que ayer fallecieron en dos accidentes laborales ocurridos en el polígono La Paz de Teruel y en una pista forestal del término municipal de Jasa (Huesca).
Este año se ha producido un incremento del 3,08% del número de accidentes de trabajo respecto al anterior. En 2018 se produjeron 18.288 accidentes laborales, 36 de ellos mortales, siendo la medida en Aragón de algo más de 50 accidentes con baja al día.
La lucha contra siniestralidad laboral es una prioridad en nuestra agenda política de Izquierda Unida. “No podemos permitir el actual nivel de siniestralidad laboral que está sufriendo la clase trabajadora”,ha señalado el candidato a la presidencia del Gobierno de Aragón, Álvaro Sanz.

Ante esta situación que año tras año no cambia, exigimos un incremento de las medidas de seguridad para acabar con esta continua sangría. Medidas que deben emprenderse desde el Gobierno de Aragón como son acciones inspectoras continuadas de las condiciones de seguridad de las empresas, llegando incluso a la paralización de las actividades en aquellos lugares en los que se detecten riesgos evitables.

Reiteramos la necesidad de que jueces y fiscales actúen contra los incumplimientos de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y demanda que se den mecanismos de actuación a los delegados y delegadas sindicales para cumplir adecuadamente su función.

Para Sanz, “disminuir significativamente los accidentes laborales no será posible mientras no se modifiquen la legislación que han favorecido la implantación de un modelo de relaciones laborales basado en la precariedad y han dinamitado la negociación colectiva y la participación de las y los trabajadores en la determinación de las condiciones de trabajo”.

Caben destacar las consecuencias del trabajo eventual, “porque este tipo de contratos tienen peores condiciones económicas, con escasa formación y menos información de los riesgos del puesto de trabajo”, ha apuntado el candidato. En este sentido, consideramos que la eventualidad también es responsable de esta “sangría” como lo son las empresas, “porque son ellas las que tienen la responsabilidad de evitar el riesgo, porque son las responsables de la organización del trabajo. Y el riesgo no se evita con guantes y cascos, se evita en el origen, evaluándolo y viendo cómo se puede evitar”, ha concluido Sanz.