El Pleno de la Diputación Provincial debatirá mañana sobre este plan, cuyo fondo no cuestiona IU, pero cuyo reparto se realiza, a juicio de José Ángel Miramón, “con criterio partidista”. IU también defenderá mañana una moción de condena a la violencia machista, reclamando apoyo institucional para su prevención
Zaragoza, 11 de noviembre de 2014.- El grupo provincial de IU anuncia su abstención en el debate que tendrá lugar mañana, con motivo del pleno de la DPZ, sobre el Plan de Obras y Servicios (POS). Asimismo, defenderá una moción de condena a la violencia machista, puesto que el próximo día 25 de noviembre se celebra el día internacional por la eliminación de la violencia contra la mujer.
En cuanto al POS 2014-2015, José Ángel Miramón, diputado provincial de IU, explica: “No compartimos el criterio político partidista que es el que al final determina este reparto nada objetivo y discrecional, y que se visibiliza en la puntuación otorgada en el tercer criterio de valoración denominado Impacto social, cultural y económico y en el que iguales actuaciones son valoradas con mayor o menor impacto hasta cuadrar sus pretensiones”.
No obstante, Miramón deja claro que “Izquierda Unida apuesta por este tipo de Plan, sin cuestionar la autonomía de cada municipio para decidir las actuaciones que son necesarias y su priorización por cada uno de ellos”. Asimismo, tampoco se cuestiona desde IU “la necesidad de todas y cada una de las actuaciones propuestas”.
Condena a la violencia machista
Desde el grupo provincial de IU se propone para su debate una moción de rechazo a la violencia de género. “Entre el año 2004 y octubre de 2014 han muerto a manos de sus parejas o exparejas 683 mujeres, una barbarie que nos avergüenza como sociedad y como seres humanos”, expone el diputado de IU. Asimismo, la iniciativa de IU también pone el foco en la condena de “declaraciones de altos cargos que potencian la misoginia, que perpetúan estereotipos contra las mujeres que refuerza la violencia hacia ellas, amenazas de modificar la Ley del aborto, declaraciones de la iglesia donde se juzga a las mujeres por defender su derecho a decidir su cuerpo y maternidad, sentencias judiciales a favor del acoso sexual, asesinatos que no paran, protecciones que no llegan, divorcios que no pueden realizarse por falta de dinero, un lenguaje institucional machista, programas de televisión que potencian la desigualdad, subvenciones a la educación segregada por sexos, desmantelamiento de organismos de igualdad y de recursos públicos, etc.”.
“Si desde las instituciones se quiere llegar a un compromiso real de erradicación de la violencia de género no se tendría que haber producido el recorte tan desproporcionado de las políticas de igualdad –opina Miramón- ni recortes en las políticas sociales que afectan de forma especial al empleo femenino”.