Izquierda Unida Aragón reitera su respaldo a las reivindicaciones y la huelga convocada por el comité de Lear Épila en defensa del empleo digno y con derechos. Su Coordinador General, Adolfo Barrena, recuerda que son 300 familias las que se están jugando el empleo y destaca que el

Consejo Político de IU Aragón aprobó este miércoles por unanimidad una resolución de apoyo a huelga convocada en Lear, tras haber agotado todos los pasos posibles de diálogo por parte de los representantes de las y los trabajadores en la mesa de negociación del IX Convenio Colectivo.

Ayer, la reunión en el SAMA entre el comité y la dirección concluyó sin avances. En este sentido, Izquierda Unida manifiesta su compromiso con la defensa del empleo y reclama su mantenimiento más allá del 2018. “Esta empresa da empleo con calidad desde hace 25 años y su cierre conlleva la precarización,” explica Barrena para recordar que su portavoz parlamentaria, Patricia Luquin, ha trasladado este conflicto laboral a las Cortes de Aragón porque el impacto económico y social del cierre concierne a todos y todas. Además, IU reclama a la multinacional automovilística que respete del derecho a la huelga y no utilice los días de ERE para limitar los perjuicios a la producción del Corsa.

Cabe destacar que las y los trabajadores de Lear en Épila se enfrentan a una “complicada e injusta” situación ante la negativa de la dirección a encontrar una solución al cierre de la planta en dos años si no se incorpora a la fabricación del nuevo modelo de Opel Corsa que prepara la factoría de la multinacional del automóvil en Figueruelas y sin ofrecer recolocaciones en Johnson Controls (adjudicatarios de los asientos del modelo Corsa de Opel).

Ahora, tras haber agotado todos los pasos posibles de diálogo, el Comité de Empresa se ha visto abocado a realizar una convocatoria de huelga desde el día 18 al 29 de julio ambos inclusive.

IU lamenta que la multinacional automovilística no haya pujado por la fabricación de los nuevos asientos del Opel Corsa, que hubiera garantizado la continuidad de la planta de Lear Épila. “La planta tiene beneficios, por lo que este cierre puede tener otros intereses”, concluye Barrena abogar por una solución dialogada que no perjudique a los trabajadores y trabajadoras de la planta de Épila.