El diputado en el Congreso por la coalición la Izquierda de Aragón ha pedido hoy la dimisión del presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), Xabier de Pedro, por la “desastrosa” gestión de las riadas y avenida extraordinaria del Ebro. Sanz ha criticado duramente al presidente de la CHE durante su intervención esta mañana en el Pleno de la Cámara en la que se ha convalidado el Real Decreto-Ley por el que se adoptan medidas urgentes para reparar los daños causados por las inundaciones y otros efectos de los temporales de lluvia, nieve y viento acaecidos en los meses de enero, febrero y marzo de 2015.
Sanz ha mostrado su solidaridad con las poblaciones que han sufrido los efectos del temporal, en nuestras costas y en diferentes cuencas hidrográficas del Estado, como en las de la ribera del Ebro a causa de las riadas y la crecida extraordinaria del Ebro que “hoy, ahora, sufre los efectos de una nueva crecida del río que vuelve a anegar, si bien en menor medida, pero con mucho más efecto del que debería al estar destruidas muchas defensas, una parte de las superficies que ya quedaron bajo las aguas en la anterior avenida que da origen a este Decreto”.
El diputado aragonés, que ha tachado el texto de “insuficiente” porque “está lejos de representar una solución para los afectados por esta última avenida”, ha lamentado la ausencia de propuestas a medio y largo plazo para “saber gestionar la convivencia con el río en un entorno fuertemente antropizado como es el de la cuenca del río Ebro y evitar que eso suceda año tras año”.
“Cada vez que se producen avenidas en el río Ebro, -ha lamentado- surge el debate sobre qué hacer con el río para luego no hacer nada y esperar a la próxima avenida y oigamos despropósitos que llegan a agitar espantajos trasvasistas”.
“Es intolerable que, en lugar de hablar de la urgente e imprescindible necesidad de un Plan Integral de Prevención y Gestión de Avenidas en el Ebro, con visión integral de cuenca, hablen de trasvase las autoridades responsables de la gestión de esta crisis”, ha señalado Sanz desde la tribuna.
Sanz, que ha pedido la dimisión de Xabier de Pedro, ha recordado la “tremenda descoordinación entre las administraciones competentes, con informaciones cambiantes sobre caudales en cortos espacios de tiempo, con total desamparo de los municipios afectados y con una absoluta falta de toma de decisiones por parte de los responsables de gestionar los momentos críticos, que no son otros que la CHE, responsable único de la gestión de esta cuenca intercomunitaria, y en menor medida y los distintos Gobiernos Autonómicos”.
“Los municipios, que sí estuvieron a la altura de las circunstancias, quedaron en total soledad durante demasiado tiempo y tuvieron que tomar las decisiones que pensaron más eficaces para la salvaguarda de los cascos urbanos, todo esto con la ayuda de los habitantes del territorio que actuaron solidariamente con medios humanos y materiales por el interés general algo a lo que este decreto cicatero no da respuesta”, ha aseverado para advertir que el coste de paliar los daños debería ser asumido en su integridad por el Estado, que es el responsable”.
En cuanto al contenido del Decreto, el diputado ha aseverado que excluye de ayudas todos los trabajos que los ayuntamientos realizaron con medios propios, humanos y materiales que hubieran sido contratados con anterioridad a los hechos y, además, el Estado sólo asume hasta el 50% del coste de las actuaciones posteriores. Otro de los aspectos más criticado por Sanz es que el Decreto cierra las puertas a que se pueda contratar personal para la realización de las medidas previstas en él. Dice literalmente que no podrá haber “incremento de retribuciones ni de otros costes de personal” y excluye alrededor del 50% de los damnificados si tenemos en cuenta el grado de penetración de los seguros, condición para acceder a la ayuda.
El diputado ha explicado que este año deberían aprobarse los planes de gestión de zonas inundables y los sistemas de compensación por daños para algunas actividades humanas, como ciertos cultivos. “Sin embargo, el Gobierno sigue alentando políticas que implican modificar artificialmente el ancho y la forma de los ríos, creando una falsa sensación de seguridad y de control”.
Entre las propuestas que la Izquierda Plural plantea en el Congreso destaca la aprobación y puesta en marcha del Plan de Gestión de Riesgo de Inundación con una visión integral y de cuenca recuperando el espíritu del Plan Medioambiental del Ebro; medidas de prevención, de protección y de recuperación tales como la reposición inmediata de las infraestructuras, especialmente las agrícolas y ganaderas, y la adopción de otro método indemnizatorio con la financiación suficiente contemplada en los Presupuestos Generales del Estado que cubra el 100% de los daños y que no dilate su cobro en el tiempo; el blindaje de los cascos urbanos, la mejora de los mecanismos de información y protocolos de actuación, entre otras.
En este sentido, Sanz ha explicado que para la Izquierda Plural hay dos elementos claves que han de guiar toda actuación: definir con claridad los límites del dominio público hidráulico y sus zonas asociadas y una limpieza del río sostenible, eficaz y continuada a medio y largo plazo superando otras fórmulas que, además de ser ilegales, más costosas no solucionan la problemática de las inundaciones.
“Hoy lo importante y urgente es compensar y ayudar a los afectados y afectadas, estamos plenamente de acuerdo, pero su decreto se queda muy corto en este sentido y tiene mucho de propaganda”, ha concluido.